Nutrición
Desayunar no sirve para perder peso
Published
6 años agoon
By
José CabralSi hay una ingesta que ha levantado polémica en nutrición durante los últimos años, ha sido sin duda el desayuno; especialmente desde que las redes sociales han entrado en juego.
La primera ingesta del día ha protagonizado muchos conflictos. Hace años que España empezó a darse cuenta de que las galletas no eran tan saludables como se pensaba. Desde entonces se han sucedido episodios de conflictos de interésentre sociedades sanitarias e industria alimentaria, reacciones desorbitadas en Twitter por darle garbanzos para desayunar a un niño, polémica porque los desayunos de hospital sean tan poco saludables, o la reciente y absurda dicotomía de qué es peor, desayunar mal o no desayunar.
Una evidencia científica bastante robusta ha tardado mucho tiempo en hacerse un hueco en la sociedad: el desayuno no esa comida tan imprescindible que muchos anuncios y paquetes de galletas y cereales nos hicieron creer. Y no, ni siquiera es concluyente para el rendimiento mental de los pequeños (salvo que estuvieran malnutridos previamente).
En este contexto en el que el desayuno estaba perdiendo la importancia que había ganado a golpe de publicidad durante tantos años, se ha producido el último mazazo, una revisión sistemática y meta-análisis sobre el efecto del desayuno en el control de peso.
El estudio, publicado en BMJ, sugiere que, a pesar de las recomendaciones generalizadas de los dietistas de incluir un buen desayuno en la estrategia para perder peso, hay que tener precaución, especialmente en el caso de los adultos, ya que “podría tener el efecto contrario”.
Tras el análisis de los 13 estudios incluidos en el informe, se observa que las personas que desayunaban acababan incluyendo una mayor ingesta energética a lo largo del día que aquellas personas que no lo hacían.
Independientemente de que el desayuno es una ingesta más a lo largo del día, no debería sorprendernos que aquellas personas que desayunan frente a las que no lo hacen tengan a priori una mayor ingesta calórica a lo largo del día, ya que empiezan la jornada con una ingesta más de “ventaja”.
No debería sorprender que el desayuno se asocie a una mayor ingesta de kilocalorías puesto que se trata de una comida que en nuestro entorno no suele ser precisamente la más saludable.
Este nuevo estudio, por tanto, viene a asentar una evidencia ya existente: actualmente no podemos decir que el desayuno sea la comida más importante del día, y tampoco está justificado promover el desayuno como una estrategia para la pérdida de peso.
¿Qué conclusiones podemos sacar?
Si algo podemos sacar en claro de estas últimas polémicas y estudios es que el desayuno no es tan imprescindible como se nos ha hecho creer durante décadas.
Pero especialmente deberíamos extraer una reflexión de cómo divulgamos los mensajes de salud pública. Durante décadas se ha estado repitiendo un mantra que no era cierto, no era prioritario y la población además estaba ejecutando de manera poco saludable.
Nunca tuvo sentido que se le dijera a la ciudadanía que tenía que desayunar sí o sí (menos aún con motivaciones de pérdida de peso). En lugar de centrarnos en la importancia de mantener esta ingesta, parece más sensato centrar el mensaje sobre la calidad de la misma, especialmente dada la alta prevalencia de malos desayunos. Por tanto, es más necesario evitar un mal desayuno que promover la idea de que existe un desayuno óptimo.
Si hubiera que resumir esto en un mensaje más moderno y actualizado, probablemente deberíamos formularlo de la siguiente manera: el desayuno no es imprescindible, pero es una oportunidad de empezar el día de manera saludable. Si decides hacerlo, incluye alimentos que sean saludables. Si por el contrario fueses a consumir opciones superfluas como galletas, dulces, bollería o bebidas azucaradas, el consejo más certero sería o bien mejorar ese desayuno, o mejor saltarse esa ingesta hasta media mañana o la comida.
Nutrición
Comparecencia de Francisco Javier García es aceptada por el TSE.
Published
7 meses agoon
mayo 15, 2025
Santo Domingo, R.D.-La solicitud de Francisco Javier García de comparecer ante el Tribunal Superior Electoral (TSE) fue acogida para explicar la notificación el pasado 20 de marzo de sus intenciones de aspirar a la candidatura presidencial por el Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
La solicitud fue realizada a través del abogado Manuel Galván, durante la audiencia del pasado lunes 12 de mayo, donde Galván, en representación del PLD, pidió la comparecencia ante el TSE con el fin de explicar que el proceso de notificación de las aspiraciones de García se enmarca dentro de la legalidad y las normativas del partido al que pertenece.
En ese orden, el coordinador del proyecto de García, Víctor Fadul, expresó que reciben la resolución emitida por el TSE, que convoca al dirigente político para que comparezca y documente sus acciones, en respuesta positiva a su solicitud.
«La notificación de las aspiraciones de Francisco Javier, realizada el pasado 20 de marzo, se efectuó atendiendo a un mandato del Comité Político del PLD. Los partidos tienen el derecho de llevar a cabo procesos internos; no hay ninguna violación electoral, sino más bien se respeta la institucionalidad partidaria, la democracia y el centralismo democrático que guía a nuestro partido», puntualizó Fadul.
La receptividad del alto tribunal electoral es positiva para el proceso interno, pues aclara a quienes desconocen los reglamentos partidarios, así como los deberes y derechos contemplados en la Ley Electoral y la Constitución.
Nutrición
La dieta perfecta para un envejecimiento saludable
Published
1 año agoon
septiembre 12, 2024EFE
Madrid.– En España cada vez se destinan más recursos a investigar cuál es la dieta saludable ideal para que una persona viva los años de envejecimiento con la mejor calidad posible.
Según los últimos datos de la agencia estadística Eurostat, España es el país de la Unión Europea (UE) que registra una mayor esperanza de vida, con 84 años de edad, una cifra que se encuentra 2,5 puntos por encima de la media europea.
Es uno de los países más longevos del mundo y, de entre varias hipótesis de las causas, el estilo de vida juega un papel importante.
De hecho, la dieta se ha postulado como uno de los mecanismos más importantes.
Gracias a los múltiples avances en ciencia y tecnología, nuestra esperanza de vida aumenta cada año. Por ello, la población mayor cada vez es más numerosa.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ya predijo que, entre 2015 y 2050, la proporción de la población mundial mayor de 60 años casi se duplicará del 12 % al 22 %.
Diana Díaz-Rizzolo, investigadora y profesora de los Estudios de Ciencias de la Salud de la UOC, experta en nutrición y longevidad, investiga en este ámbito y explica las características que debe tener una dieta perfecta para el envejecimiento
1. Evitar una alimentación restrictiva
La experta advierte de que es necesario poner atención en que las dietas sean completas, pues numerosos estudios han puesto de manifiesto que los déficits nutricionales pueden ser comunes en personas de edad avanzada.
En caso de exceso de peso, Díaz-Rizzolo, experta del máster universitario de alimentación saludable y sostenible de la UOC, explica que hace falta enfocarse en la calidad de la dieta.
“Es común que haya personas con exceso de peso porque siguen con una dieta parecida a la época de adultos jóvenes. El gasto energético ha disminuido bien porque hacemos menos actividad física o dejamos el ejercicio por diversos motivos y porque nuestro gasto calórico basal se ve disminuido por la propia edad”, apunta la especialista.
El gasto energético ha disminuido con la edad, bien porque hacemos menos actividad física y porque nuestro gasto calórico basal se ve disminuido por la propia edad. EFE/ Nacho Gallego2. Enfocarse en calidad (y no en cantidad) de la dieta
La experta indica que la calidad de la dieta debe ser el objetivo.
Más variedad de alimentos de mejores fuentes nos proporcionarán los nutrientes que necesitamos, nos saciarán más y nos aportarán más energía que alimentos menos saludables.
“Por ejemplo, un plato grande de verduras asadas (más de 300 g de zanahoria, pimiento, calabacín y berenjena) acompañado de un buen trozo de tortilla de patatas parece mucha cantidad, pero un bocadillo tipo sandwich mixto o bikini, el cual puede parecer a simple vista una cena ligera, puede aportarnos más calorías, menos saciedad por su bajo contenido en fibra y mucho menor aporte de nutrientes”, señala la investigadora.
3. Rehuir de los alimentos ultraprocesados, envejecen

Los alimentos ultraprocesados envejecen. EFE/ Alberto Valdés.
Los alimentos ultraprocesados no solo afectan directamente a nuestra salud y nos acercan a desarrollar patologías crónicas evitables, sino que además envejecen.
“Nos vuelven más frágiles y aumentan nuestro riesgo de fallecer (incluso cuando no nos aportan más calorías). Pero es que, además, promueven el envejecimiento de nuestras células. Vamos, un cóctel para vivir menos y peor”, alerta Díaz-Rizzolo.
4. Consumir proteína
A pesar de que estudios previos parecían indicar que las cantidades de proteína que consumían los adultos mayores era suficiente, se ha visto que no es así.
Las necesidades de proteína ingerida se ven afectadas durante el envejecimiento y difícilmente se incorporan las cantidades necesarias en la dieta.
Pero, anecdóticamente, se ha observado que, a más proteína animal consumida, más fragilidad en el adulto mayor.
Por este motivo, la experta recomienda priorizar la proteína vegetal a la animal.
“Lo recomendable es consumir alimentos proteicos de origen vegetal. De hecho, la sustitución de solo un 3 % de la proteína animal por vegetal supone un descenso en el riesgo de mortalidad del 10 %”, explica la profesora.
5. Moderar los cereales y tubérculos
Las poblaciones más longevas siguen patrones de dieta moderadamente ligera en alimento ricos en carbohidratos, como el arroz, la pasta y la patata.
No obstante, consumir esas grasas de origen vegetal puede suponer una prevención de desarrollar patologías durante la vejez y protegen frente al envejecimiento celular.
La investigadora de la UOC aconseja moderar los cereales y tubérculos y aumentar los frutos secos, el aceite de oliva y los aguacates.
“Por eso, una alimentación sin restricciones y con una amplia variedad de alimentos de origen vegetal puede ser nuestro mejor aliado para vivir más y mejor”, concluye Díaz-Rizzolo.
Nutrición
Los tres frutos secos que debes incluir en tu dieta diaria para sentirte con energía
Published
2 años agoon
enero 10, 2024
Los frutos secos, considerados por muchos nutricionistas como elementos fundamentales en una dieta saludable, no solo destacan por su sabor exquisito y su versatilidad culinaria, sino también por sus beneficios nutricionales. Pablo Ojeda, conocido nutricionista, ha revelado sus tres frutos secos favoritos por su excepcional valor para la salud: las almendras, las nueces y, compartiendo el tercer puesto, los pistachos y los anacardos.
Tienen un alto valor nutricional
Almendras, nueces, pistachos y anacardos, los frutos secos más destacados
Almendras, las favoritas de Ojeda, destacan por su capacidad para mantener un buen control glucémico, siendo ideales incluso para personas con diabetes debido a su bajo índice glucémico. Rica en vitamina E, grasas saludables y minerales como el calcio, las almendras ofrecen casi 20 gramos de proteínas por cada 100 gramos, superando a la leche en la provisión diaria de calcio.
Las nueces, clasificadas como contribuyentes a mejorar la elasticidad de los vasos sanguíneos por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (ESA), son esenciales para una dieta equilibrada. Consumir 30 gramos diarios de nueces puede tener beneficios significativos para la salud cardiovascular.
Pistachos y anacardos, en el tercer lugar según Ojeda, ofrecen diferentes ventajas. Los pistachos, ricos en fibra y con un fuerte efecto saciante, son ideales para controlar el hambre entre comidas y mejorar la salud ocular. Los anacardos, además de ser versátiles en la cocina, aportan triptófano, esencial para la producción de melatonina y serotonina, hormonas vinculadas al bienestar y la felicidad.
Contribuye a una mejor salud cardiovascular
La cantidad diaria recomendada es de 30 gramos
El consumo moderado de frutos secos se destaca como crucial, ya que, a pesar de sus beneficios nutricionales, poseen un alto contenido calórico. La cantidad diaria recomendada es de 30 gramos, aproximadamente un puñado, para evitar problemas digestivos.
Incorporar frutos secos en la dieta no solo contribuye a una mejor salud cardiovascular, sino que también ayuda a mantener un peso equilibrado, controlando la ingesta de alimentos y reduciendo el picoteo entre horas. Además, estos alimentos, ricos en hierro y otros minerales, potencian la función cerebral y protegen el corazón.
Más allá de sus beneficios para la salud, los frutos secos añaden una dimensión única a la gastronomía, aportando texturas y sabores distintivos. Su versatilidad permite su uso en una variedad de platos, desde recetas dulces hasta opciones saladas.
https://www.lavanguardia.com/
