Santiago, República Dominicano.-Fue aplazada por tercera vez el conocimiento de la solicitud de la medida de coerción contra los imputados en la muerte del niño Gioser Luis Camilo, hecho ocurrido en Santiago.
El caso que se conoce en el Tribunal de la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente ya sufrido varios aplazamiento por diversas razones.
De acuerdo con Caros Villanueva, abogado de uno de los procesados, la audiencia fue aplazada en virtud de que el Ministerio Público no tenía completa la cintila probatoria que propuso para los abogados. Faltaban tres CD’s por notificar.
Juan Carlos Báez, miembro del equipo de defensa de los imputados, especificó que los CD’s muestran a los imputados supuestamente esperando al ciudadano padre del menor, Sergio Luis Feliz, en las afueras del Aeropuerto Internacional del Cibao.
La audiencia fue aplazada para mañana viernes, a las 9:00 de la mañana, a solicitud de la defensa para que se les notificara y ellos verificar la información de los elementos de prueba.
Kimberly Tatis es la jueza a cargo de este proceso judicial.
Los procesados son Derlyn Javier Mercado, Luis Ángel Vargas Brito, José Manuel Almonte Santana, alías El Buqui; César Junior Ulloa Cuevas, Elián Martínez Sánchez, alias Odalis y Tomás Peña Morel, el mejor amigo de Sergio Luis Feliz, padre del menor y a quien se le acusa de haber organizado todo.
Los imputados, quienes prefirieron guardar silencio, fueron trasladados a la sala con una escolta de policías.
En el Palacio de Justicia también se encontraban presentes, Sergio Luis Feliz, padre del niño, y la madre, quien por primera vez acudió al proceso judicial.
Actualmente, esta reside en los Estados Unidos de América y se encuentra en estado de gestación.
A las afueras del Segundo Tribal Colegiado, donde se estaba conociendo la medida, por cuestiones de espacios y la antidad de imputados, había presencia de militares así como de una gran cantidad de familiares y conocidos de los procesados, quienes se encontraban a la expectativa de que se conociera en definitiva la coerción que recaerá sobre sus parientes.