Por: Agustín de la Cruz (Sugar)

New York (SL) -Al escuchar las declaraciones recientes del productor Alberto Bernabé “Bebeto” nos pareció estar escuchando la voz de una persona resentida, una especie de volcán que quiso aprovechar la situación que estuvo enfrentando Michael Michel para hacer erupción salpicando con su lava envenenada a dos ex-compañeros.

“Bebeto” se dejó sentir algo arrogante, si se quiere prepotente al afirmar con voz  mal intencionada  que él es el dueño de su programa, pero Bebeto que feo te escuchaste tratando de ocultar que tu mayor decepción no fue que Michael Miguel regresara al lado del Sr. Gómez Díaz, sino que no se quedó en la calle para tu al igual que otros lograran convertirse en el buen samaritano o el sustituto de su espacio.

Tengo frente a mí una foto del recuerdo la que fue publicada en los días que comenzabas en Súper Canal luego de tu salida de Telemicro, y son tantos los que aparecen en ella que apenas y caven frente al canal, si volviéramos a tomar esa foto apenas te reconoceríamos a ti y a unos pocos que aún te quedan ¿y me pregunto donde están esos amigos y porque ya no están contigo?

Michael Miguel, te dejó a ti y a muchos con la vara en la mano, a todo aquel que pensó que lograría pescar en Telemicro revuelto, pero el tiro le salió por la culata; Aprende alegrarte de los logros de los demás para que también lo sientas como tuyos.

Qué bien te quedo el llamarlo “llorón” por suerte que existen los refranes y por eso hoy mama, me atrevo asegurar el que todos los parlanchines que propugnaban porque Michael no sedería al diálogo y se mantuviera firme en su decisión revolucionaria de no regresar a Telemicro hoy serían los primeros en darle la espalda y salir a propagar que Michael Miguel es un loco que por ideas absurdas lo perdió todo.

Carolyne Aquino, fue la única carta de competencia que tuviste y no supiste manejarla, y al final terminaste pisoteando su integridad y el tiempo que desperdicio sosteniendo con su talento tu programa, olvidaeste que te referías a una dama, fuiste poco caballero.

Nos alegramos que el imperio y el talento hayan logrado las paces, no sólo por Michael Miguel ni el Sr. Gómez Díaz, me refiero a la familia de cada uno de sus compañeros, quienes directa y/o indirectamente dependen de dos proyectos que han demostrado ser exitosos desde sus inicios tal y como fueron concebidos, y arriesgarse hacerles cambios no les garantiza la estabilidad, y permanecía de ninguno.

Para la gran mayoría, Michael Miguel sigue siendo el gran animador de siempre, pero además se le reconoce como el revolucionario en extinción de un país sin dolientes, donde todos se quejan y cada cuatro años van a las urnas a votar por el mismo estierco.