Refugiados han protagonizado fuertes protestas (Foto: SANA)
Desplazados sirios en Jordania, ubicados en el campamento Zaatari (cerca de la ciudad norteña de Mafraq), piden ser regresados, o que se le autorice regresar a su país, dadas malas condiciones de vida que padecen en el campo, así lo reseñaron medios de prensa locales.
Los refugiados denuncian falta de condiciones esenciales para la subsistencia como carencia de servicios, comida ,pocas medidas de seguridad y falta de atención médica.
En los últimos días, más de 130 desplazados sirios volvieron de forma voluntaria a su patria ante el “chantaje político y presión psicológica, además de los malos tratos, que sufren de la gendarmería jordana», señaló agencia de noticias árabe-siria SANA.
En febrero pasado, un grupo de residentes de Zaatari fueron reprimidos con gases lacrimógenos por fuerzas de seguridad de Jordania, cuando manifestaban contra las pésimas condiciones de vida que padecen.
Decenas de refugiados sostuvieron el mes pasado, un altercado cuando distribuían el pan para el desayuno en el campamento, en ese momento intentaron saquear un almacén de un centro que reparte ayuda humanitaria.
La situación de los desplazados, que en la actualidad suman un millón de personas distribuidas en Líbano, Jordania, Turquía, Irak y Egipto. El número de refugiados sirios que huyen de su país se ha incrementado drásticamente desde el comienzo del año. Más de 400 mil personas se han convertido en refugiadas desde el 1 de enero de 2013, según datos suministrados por Acnur.
Siria ha sido escenario de ataques terroristas desde marzo de 2011, el Ejecutivo ha demostrado con pruebas que los grupos armados son responsables de los múltiples asesinatos que se cometen en el país.
Estados Unidos y sus más cercanos aliados, incluyendo naciones árabes, han manifestado públicamente su apoyo y financiamiento a grupos armados en Siria, que desde marzo de 2011 llevan a cabo acciones terroristas para intentar derrocar al presidente, Bashar Al Assad.
Los detractores del gobierno de Al Assad han reconocido que las armas llegan a sus manos desde diferentes puntos de partida, por ejemplo desde Líbano. El flujo del armamento es constante, ya que hay muchas partes interesadas en que estas armas se usen en contra de las autoridades sirias y se las dan «de forma gratuita”.