El primer tribunal colegiado de Santiago concluyó el juicio contra los implicados en el intento de asesinato contra Jordi Veras, pero se reservaron la lectura de la sentencia para el día 17 de este mes.Los magistrados dijeron que la norma procesal penal les permite establecer un plazo, luego de terminado los debates, para emitir su fallo.
La decisión fue tomada luego concluir los debates y análisis de las pruebas presentadas por el Ministerio Público, cuyos representantes solicitaron la pena máxima para los acusados, exceptuando a Francisco Carela Castro, contra quien pidieron 10 años de reclusión, tras indicar que éste mostró arrepentimiento y colaboró con el proceso.
En medio del llanto, pero a la vez con alegría, Jordi Veras y su padre el también jurista Ramón Antonio (Negro) Veras, confiaron en que los acusados serán condenados.
“Lo único que pedimos es justicia, no venganza”, manifestó Jordi, mientras que su padre dijo que espera una decisión ejemplarizadora.
Dijeron que con ese caso se envía un mensaje contra aquellos sicarios, a esas redes criminales y contra quienes pagan para que sin contemplaciones ni miramientos se atente contra los ciudadanos.
El proceso concluyó cuatro años y ocho días después de producirse la tentativa criminal contra el abogado y comunicador.
Pedido del Ministerio Público
Al concluir al fondo, el Ministerio Público pidió 30 años de prisión contra Adriano Román, Franklin Reynoso Moronta, Engels Carela Castro, Candy Caminero, el teniente Roberto Zabala y el agente Arturo José Ferreira.
Mientras que la parte civil constituida solicitó una indemnización de 250 millones de pesos en favor de la víctima.
Los juristas José Lorenzo Fermín y María Alejandra Pola, al desglosar ante los jueces del Primer Tribunal Colegiado los efectos causados a Veras, solicitaron 200 millones por daños físicos, 25 por daños económicos, otros 25 millones por lucro cesante y el pago de las costas.
Fermín dijo que además de causarle la pérdida de la visión, Jordi Veras se vio por casi tres años imposibilitado de trabajar.
La audiencia inició a las 9:45 de la mañana y concluyó a las 10:35 de la noche. Los defensores públicos, durante la exposición de los debates, alegaban que no existían elementos de prueba para vincular a los imputados y cuestionaron que Francisco Carela se convirtiera en testigo estrella cuando los testigos establecen su implicación.
Reynoso Moronta, Engels Carela Castro, Candy Caminero, Arturo José Ferreira pidieron al tribunal que analizara bien las pruebas tras asegurar que no tienen vinculación con el caso.
Familia Veras no cesó en su clamor de justicia
Todo el proceso se vio plagado de dificultades motivadas por renuncia de los defensores públicos, al punto de que fue aplazado en 32 ocasiones, incluso durante la apertura a juicio. El atentado ocurrió el 2 de junio del 2013 en las primeras horas de la mañana, cuando Jordi llegaba a las instalaciones del canal 25, ubicadas en el centro histórico, donde se desempeñaba como comentarista. Cada mes Negro Veras y Jordi se encargaban de recordar el hecho y hacer sentir su clamor para que se hiciera justicia.