Unas 33 millones de personas están llamadas a acudir este domingo entre las 8.00 hora local (11.00 GMT) y las 18.00 (21.00 GMT) a 14.500 lugares de votación, donde se han desplegado un total de 90.084 mesas, en una jornada que se prevé tranquila y sin grandes sorpresas.
En estos comicios, se elegirá a 127 diputados para un periodo de cuatro años y 24 senadores -los correspondientes a 8 provincias del país- para seis años.
Con el fin de garantizar la seguridad, se desplegó un operativo en el que participan 106.000 efectivos, según se informó en la rueda de prensa en la que se brindaron los detalles del procedimiento este viernes.
El secretario de Asuntos Políticos del Ministerio del Interior argentino, Adrián Pérez, no descartó la posibilidad de que se produzcan amenazas de bomba en los colegios, ya que, entre el 1 de septiembre y el 4 de octubre, se contabilizaron casi 3.000 llamadas sin identificar a los servicios de emergencias en las que se comunicaba la alerta a escuelas que a continuación se evacuaban.
Pérez reveló que si esto ocurriese hoy, se activará un “procedimiento especial” sobre el protocolo existente, que consiste en evacuar el colegio electoral y revisar el centro “para volver con las autoridades de mesa a llevar adelante el proceso electoral”.
Además, avanzó que los primeros resultados se difundirán a las 21.00 hora local (00.00 GMT del lunes), con actualizaciones cada cinco minutos, pero evitó dar la hora exacta en la que se conocerán los resultados definitivos.
El voto es obligatorio para todas aquellas personas que tengan más de 18 años y, desde 2013, los jóvenes de 16 y 17 años pueden ejercerlo de forma optativa.
La recta final de la campaña ha estado marcada por el caso de Santiago Maldonado, un joven de 28 años que desapareció el pasado 1 de agosto cuando participaba en una manifestación de una comunidad indígena que fue reprimida por la Gendarmería y cuyo cuerpo fue hallado el martes en un río, cerca de donde se desarrolló la protesta, e identificado este viernes.
Pese a ello, el oficialismo llega con buenas sensaciones a los comicios tras las primarias del pasado agosto, en las que obtuvo alrededor de un 35 % de los votos a nivel nacional, fortaleciéndose así como la primera minoría del país y logrando vencer en territorios históricamente peronistas.
Además, las últimas encuestas en la provincia de Buenos Aires, el mayor distrito electoral del país, ponen al líder de la lista de candidatos a senadores del oficialismo, Esteban Bullrich, por delante de su principal rival: Cristina Fernández, quien venció por apenas 0,21 puntos en las primarias con la agrupación Unidad Ciudadana.
Pese a que muchos ven este resultado como un fracaso para la expresidenta, independientemente del número de votos que logre, el desenlace es el mismo: Fernández regresará al Senado y desde su banca, podrá volver a alzarse como una de las líderes opositoras más fuertes. EFE