Santo Domingo, R.D.-El Ministerio Público y la defensa de los siete imputados en el caso Camaleón entrarán al proceso de réplicas y contrarréplicas durante la audiencia de conocimiento de medida de coerción en contra de la red.
Tras terminar la exposición de los abogados de Jochi Gómez Canaán y Carlos Vargas Lorenzo, la jueza del Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional, Fátima Veloz, otorgará a los representantes del Ministerio Público la oportunidad de replicar ante las defensas realizadas por los implicados; luego, los acusados podrán contrarreplicar ante lo dicho por la barra de las autoridades, que están encabezada por Wilson Camacho y Mirna Ortíz.
Durante los 10 minutos de receso otorgados por el tribunal, Ingrid Hidalgo, abogada de Samuel Gregorio Baquero Sepúlveda, director de Tecnología del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant), indicó que existen los argumentos suficientes para que su cliente no sea enviado a prisión preventiva como medida de coerción.
«(Baquero) Es un ciudadano español, cuyo pasaporte siempre mantuvo en sus manos; inclusive salió del país, retornó y entrega el pasaporte el día del allanamiento. Es decir, que en todo momento pudo sustraerse del proceso; él está dispuesto y tiene los suficientes arraigos para presentarse en todo acto del proceso como lo ha hecho», expresó Hidalgo.
La jurista indicó que contrario a lo solicitado por el Ministerio Público, quienes pidieron 18 meses de prisión preventiva como medida de coerción, estos manifestaron al tribunal que le impongan a su cliente la presentación periódica cómo medida cautelar.
«Debemos saber que no porque no exista un preso, no hay un proceso y parece que a eso es que estamos acostumbrados. A qué todo el mundo tenga que estar en una cárcel, para que puedan decir que hay un caso», exclamó Hidalgo, quien recalcó que su cliente había entrado al Intrant antes de la llegada de Hugo Beras, uno de los principales implicados en el caso y que renunció de la misma hace poco más de un año.
El Ministerio Público sostiene en su acusación que como encargado de la red semafórica y de videovigilancia del gran Santo Domingo, Gregorio Baquero fue una pieza clave en la coordinación técnica del fraude; además de señalarlo como la persona que facilitó el control de los sistemas a la empresa Transcore Latam S.R.L., la cual no cumplía con los requisitos legales ni técnicos para ejercer esas funciones.
Las autoridades indican que este adaptó la evaluación pericial en el proceso de licitación para favorecer a las empresas Aurix, Transcore Latam e Inprosol.
Mientras, falsificó el contenido de una certificación en donde declaraba que el Intrant había recibido de forma completa los bienes y servicios de Transcore Latam, esto con el propósito de que le desembolsaran el pago.
Baquero es imputado por participar en la ejecución técnica del esquema fraudulento, comprometiendo la seguridad vial y la transparencia en el uso de fondos públicos, siendo coautor de los delitos de asociación de malhechores, estafa contra el Estado, desfalco, coalición de funcionarios y falsificación, se lee en el documento depositado.
«Un expediente vacío»
De su lado, la defensa de Carlos José Peguero manifestó a los medios de comunicación que se encuentran positivos de que su cliente saldrá bien parado de este proceso cautelar.
«Nosotros estamos positivos porque ciertamente, como hemos venido diciendo desde el inicio, esas 304 páginas del Ministerio Público es un expediente vacío; para nadie es un secreto que estos imputados tienen buenos presupuestos, tienen buenas garantías, no se van a sustraer del proceso, mas que ustedes saben que esto es un show más mediático que otra cosa», manifestó el abogado Ricardo Alcántara.
A Peguero Vargas se le acusa de movilizar fondos a través de la empresa Inprosol S.R.L., desviando el dinero adjudicado a Transcore Latam; por igual era el encargado de los asuntos técnicos-informáticos de la estructura de vigilancia y espionaje de José Gómez Canaán, dice el organismo. De igual forma colaboró en la construcción de la estructura financiera ilícita de este.
A este se le imputa por los cargos de asociación de malhechores, estafa contra el Estado, lavado de activos, así como sabotaje a la red semafórica, y en actos de terrorismo en contra infraestructuras críticas del Estado dominicano.
Al grupo de siete implicados se le acusa de cometer delitos de alta tecnología, lavados de activos, falsificación y uso de documentos falsos y estafa contra el estado a través de las contrataciones públicas con las que fueron favorecidas esas empresas