Economía
Cinco factores a tener en cuenta conforme el crudo Brent alcanza US$70
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7 años agoon
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LA REDACCIÓNEl riesgo geopolítico, el petróleo de esquisto estadounidense, el crecimiento global, la política de la OPEP y los fondos de cobertura tendrán un impacto
El crudo Brent ha superado los US$68 por barril por primera vez desde 2015, y se encuentra a una corta distancia de niveles no vistos desde que cayó de más de US$100 el barril. Con el petróleo en su nivel más sólido en tres años, éstos son los factores clave a considerar.
Irán es el tercer mayor productor de petróleo de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), y su producción de 3.8 millones de barriles por día (b/d) representa más del 4% del suministro mundial de petróleo, razón por la cual las protestas políticas en el país durante la última semana sin duda han captado la atención del mercado.
Si bien las protestas hasta ahora no han tenido ningún impacto en la producción de petróleo crudo y, en general, se considera que es poco probable que directamente lo tengan, a menos que generen una mayor agitación política en el país, los operadores siguen vigilando de cerca cualquier efecto colateral. Los analistas de JBC Energy han declarado que el mayor riesgo a corto plazo es que la respuesta del gobierno iraní ante las protestas provoque más sanciones por parte de EEUU, con una escasa probabilidad de que el presidente Donald Trump certifique el histórico acuerdo nuclear con Irán a fines de este mes.
“El potencial restablecimiento de las sanciones estadounidenses contra la industria petrolera iraní continúa siendo un problema”, agregaron los analistas de JBC.
Las tensiones entre Irán y Arabia Saudita, el mayor productor de la OPEP, también están en aumento, particularmente a causa de la guerra en Yemen. Dos misiles balísticos — de cuyo suministro a las milicias hutíes Riad ha acusado a Irán — han sido disparados hacia la capital saudita en los últimos meses.
Los suministros de petróleo del Kurdistán iraquí también han disminuido desde octubre, cuando Bagdad recuperó campos petrolíferos en territorio disputado de la región semiautónoma.
Venezuela, otro miembro de la OPEP, ha visto su producción caer al nivel más bajo en casi 30 años debido a una creciente crisis económica, y algunos analistas estiman que su producción de 1.9 millones de b/d representa el mayor riesgo potencial de suministro en 2018.
La gran esperanza de los operadores que apuestan contra el repunte es que, este año, el petróleo de esquisto estadounidense y otros suministros provenientes de países no OPEP crezcan más rápidamente que el consumo.
La Administración de Información Energética (EIA, por sus siglas en inglés) de EEUU ya está pronosticando que la producción de esquisto estadounidense aumentará en 780,000 b/d en 2018, más del doble de los 380,000 b/d en los que se expandió el año pasado. El pronóstico de este año probablemente se revisará incorporando cantidades más elevadas con el crudo por encima de los US$60 el barril.
También se anticipa que los proyectos convencionales a gran escala comisionados antes de la caída entren en funcionamiento en Brasil y Canadá este año, impulsando el suministro total proveniente de países no OPEP en aproximadamente 1.6 millones de b/d en 2018, según la Agencia Internacional de Energía (IEA, por sus siglas en inglés). “La inevitable reanudación del crecimiento en EEUU… probablemente estimulará el aumento de las existencias de crudo nuevamente en 2018”, comentó el analista de Morningstar Joe Gemino.
Sin embargo, una interrogante se cierne sobre cómo le pueda ir al suministro de fuera de la OPEP durante años subsiguientes después de los masivos recortes de los gastos de capital desde 2014. ¿Puede el petróleo de esquisto crecer lo suficientemente rápido por sí solo?
La fortaleza del crecimiento de la demanda ha sido la historia escasamente contada de la recuperación del precio del petróleo, con el consumo expandiéndose en casi 5 millones de b/d entre principios de 2015 y finales de 2017, en comparación con un crecimiento anual muy inferior a 1 millón de b/d cuando el petróleo estaba por encima de US$100 por barril.
Si bien parte de ese crecimiento resurgente se ha debido indudablemente a unos precios más bajos, el repunte de la economía global también representa un factor importante, ya que la mayoría de los pronosticadores creen que el mundo está disfrutando del período de expansión más sólido desde la crisis financiera. El Fondo Monetario Internacional (FMI) considera que el producto interno bruto (PIB) mundial aumentará un 3.6% este año.
Mientras que el crudo de US$60 por barril moderará ligeramente la demanda — el Brent promedió alrededor de US$55 por barril el año pasado y US$45 por barril en 2016 —, si la economía mundial sigue creciendo con fuerza, será más difícil defender una posición bajista.
El nivel de acumulación estratégica de China, el cual la consultora Energy Aspects estima que haya representado 150 millones de barriles en 2017, también se vigilará de cerca, aunque las cifras oficiales son dudosas. La firma Energy Aspects comentó que se podrían colocar otros 130 millones de barriles en el almacenamiento estratégico chino en 2018.
La alianza entre la OPEP, Rusia y otros grandes productores para eliminar 1.8 millones de barriles diarios del mercado desde enero pasado ha tenido el mayor impacto sobre el drenaje de los inflados inventarios petroleros. A fines de noviembre se acordó extender el trato hasta 2018, aunque se revisará durante la próxima reunión del grupo en junio.
Los operadores están esperando a ver si Rusia — que ha enfrentado oposición por parte de las compañías petroleras nacionales a causa de los recortes — y el eje de la OPEP, Arabia Saudita, pueden acordar una estrategia que evite que una enorme cantidad de barriles regresen al mercado. El cumplimiento del acuerdo por parte del grupo, el cual impresionó a la mayoría de los operadores en 2017, también será monitoreado para ver si los ‘grifos’ de los miembros comienzan a abrirse ante la seducción de unos precios más altos.
Los fondos de cobertura han aprovechado y alimentado el repunte del petróleo, acumulando una posición alcista récord equivalente a más de 1 mil millones de barriles en Brent y West Texas Intermediate, la referencia estadounidense, en la creencia de que los precios seguirán aumentando.
Aunque existe el riesgo de que tomen ganancias después de los recientes aumentos — potencialmente presionando al mercado si las posiciones de los fondos se venden — existen razones para sospechar que esto no sucederá. El movimiento del mercado hacia la “backwardation” — donde los precios actuales se negocian a precios más elevados que los contratos de entrega en meses posteriores — hace más atractivo el mantener largas inversiones financieras en el sector petrolero ya que los inversionistas pueden obtener un rendimiento mensual al extender las posiciones.
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Economía
El dólar era vendido este jueves a 60.25 pesos en Rep. Dominicana
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11 horas agoon
noviembre 14, 2024Santo Domingo, R.D.- El dólar era vendido este jueves a 60.25 pesos en República Dominicana.
El Banco Central fijó el cambio para de la siguiente manera:
Compra: 60.05
Venta: 60.25.
Economía
El Ministerio de Trabajo revela los días feriados del 2025
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12 horas agoon
noviembre 14, 2024Santo Domingo, R.D.-El Ministerio de Trabajo informó este jueves cuales serán los días feriados del calendario para este 2025 en el país, dando cumplimiento a la Ley 139-97, la cual establece el traslado de algunos días para que puedan ser disfrutados por la población, en especial, por la clase trabajadora.
A través de nota de prensa, la entidad recordó que la ley establece el traslado para los lunes de los días feriados que coincidan con los martes, miércoles, jueves o viernes.
«La ley fue publicada en la Gaceta Oficial 9957, de fecha 25 de junio de 1997, entró en vigor el 27 del mismo mes y año, por lo que, de conformidad con lo establecido por nuestra legislación, debe ser aplicada en todos los establecimientos del país», dice el documento.
En esta ocasión, el Ministerio de Trabajo resaltó solo dos fechas que deben ser trasladadas, los demás días se celebrarán en su fecha original.
Los días feriados del 2025 se aplicarán de la siguiente manera:
El miércoles 1 de enero, fecha de celebración de Año Nuevo, no se cambia.
El lunes 6 de enero, día de los Santos Reyes, no se cambia.
El martes 21 de enero, día de Nuestra Señora de la Altagracia, no se cambia.
El domingo 26 de enero, fecha en que se conmemora el natalicio de Juan Pablo Duarte, no se cambia.
El jueves 27 de febrero, día de la Independencia Naciónl es inamovible.
El viernes 18 de abril, Viernes Santo, festividad religiosa en que se conmemora la muerte de Jesucristo, inamovible.
El jueves 1 de mayo, día del Trabajo, se trabaja y se cambia para el lunes 05 de mayo.
El jueves 19 de junio, día en que se celebra la festividad religiosa Corpus Christi, no se cambia.
El sábado 16 de agosto, día de la Restauración de la República, no se cambia.
El miércoles 24 de septiembre, día de Nuestra Señora de las Mercedes, no se cambia.
En tanto que, el jueves 06 de noviembre, día de la Constitución, se trabaja y se cambia para el lunes 10 de noviembre.
El jueves 25 de diciembre, día de Navidad o nacimiento de Jesús, no se cambia.
Estos son los días feriados del 2024
Puntos para entender por qué algunos días se cambian, según la Ley 139-97:
Traslado de días feriados a lunes:
- Los días feriados que caen entre martes y viernes se trasladarán al lunes más cercano. Esto incluye feriados como:
- Día de Duarte (26 de enero)
- Día del Trabajo (1 de mayo)
- Día de la Constitución (6 de noviembre)
- Si el día feriado cae en sábado, domingo o lunes, se mantiene en esa fecha.
Excepciones: algunos días festivos se celebran siempre en su fecha original, sin traslado. Estos son:
- Día de la Independencia Nacional (27 de febrero)
- Viernes Santo (fecha variable)
- Día de la Restauración (16 de agosto)
- Día de la Virgen de la Altagracia (21 de enero)
- Día de Navidad (25 de diciembre)
Economía
Moody’s, Standard & Poor’s y Fitch Ratings mantienen sin cambios su evaluación riesgo país RD
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1 semana agoon
noviembre 6, 2024Las firmas calificadoras Moody’s, Standard & Poor’s y Fitch Ratings mantuvieron sin cambios su evaluación sobre la economía dominicana, según el último informe trimestral de riesgo-país, publicado por la Secretaría Ejecutiva del Consejo Monetario Centroamericano (Secmca).
Según la publicación del Informe de Riesgo País, tercer trimestre 2024, cortado a septiembre, su evaluación al alza está condicionada a la implementación de medidas de política que fortalezcan la flexibilidad fiscal y mejoren la composición, por moneda, de la deuda gubernamental, para futuras revisiones.
También, el retorno a alto crecimiento (en el contexto de estabilidad externa y macroeconómica) que conlleven a una convergencia del PIB per cápita con países con mejores calificaciones.
A la baja, no obstante, señalan que es necesario considerar “si hubiese un fuerte deterioro de las razones de deuda gubernamental a PIB y de intereses a ingresos; por ejemplo, a través de un relajamiento de la política fiscal, menor crecimiento al esperado o pérdidas financieras de las empresas de electricidad estatales”.
Deuda
La deuda pública se situó en US$73,419.2 millones a abril de 2024, con una tasa de crecimiento de 1.46%.
• Historial de robusto crecimiento económico.
• Matriz exportadora diversificada.
• Altos indicadores sociales y PIB per cápita.
Centroamérica
Para el cierre del tercer trimestre del año 2024, la agencia calificadora de riesgo Moody’s realizó revisiones y actualizaciones en las calificaciones de deuda soberana y perspectivas de riesgo país para Costa Rica y Guatemala, señala la publicación.
En Costa Rica, la revisión fue al alza en su calificación de riesgo, mientras que, para Guatemala, la revisión consistió en una reafirmación tanto de su calificación de deuda como de perspectiva de riesgo país.
No obstante, en octubre, Standard & Poor’s elevó la calificación de Nicaragua, pasando de ‘B’ a ‘B+’ con perspectiva estable.
Las revisiones se realizaron tomando en cuenta el desempeño de indicadores como la evolución de la actividad económica, déficit fiscal, necesidades de financiamiento (local y externo), análisis de ratios deuda pública/PIB, de intereses de deuda/ingresos fiscales, e indicadores del sector externo, entre otras.