Antonio Marte, Blas Peralta , Juan Marte y Arsenio Quevedo

Como una imprudencia y una provocación a los choferes calificaron ayer empresarios y representantes de los transportistas de carga y pasajeros el aumento de $3.70 y $3.20 a la gasolina y al gasoil por el Ministerio de Industria y Comercio.

La posición la externaron Antonio Marte, de la Confederación Nacional del Transporte (Conatra); Blas Peralta, de la Federación Nacional de Transporte Dominicano (Fenatrado); Juan Marte, de la Central Nacional de Trabajadores del Transporte (CNTT) con sede en Santiago; Arsenio Quevedo, de la Unión Nacional de Transportistas y Afines (Unatrafin), y Ramón Pérez Figuereo, de la Central Nacional de Transportistas Unificados (CNTU).

Peralta enfatizó que el alza en los carburantes, después de dos semanas con el precio estable, el aumento lo que viene es a profundizar la crisis que atraviesan los transportistas, cuyo costo de operaciones cada día se incrementa.

Abogó porque el Gobierno se siente con los diferentes sectores para que se “revisen las tarifas matemáticas, no políticas”, y se ajusten a la real situación.

El líder de Fenatrado subrayó que los transportistas de carga y pasajeros no les interesa que se le subsidien combustible, sino que se cumpla con el acuerdo del 3 de julio del 2008, en que se pactó que el gasoil para el sector llegaría a 145 pesos y el GLP a $55.

Deploró que el Gobierno subsidie a un grupo de empresas generadoras de energía, constructoras y de zonas francas con millones de galones de gasoil y gasolina, porque se quiere excluir al sector transportista.

En tanto que Marte demandó del cumplimiento de los referidos acuerdos entre el Gobierno y los empresarios del transporte,  para que llegue el gasoil al sector a $145, la gasolina $160 y el GLP a $65.

Abogó porque el Gobierno sincere los precios de los carburantes, por que el costo de operación  y el déficit es cada día más elevado.

Advirtió que los miembros de Conatra no soportan más y sólo esperan agotar las reservas de gasoil para paralizar sus unidades en talleres y en los garajes.

Pérez Figuereo consideró  “una señal negativa y una provocación” de Industria y Comercio la medida que calificó de impopular, que viene a trastornar el proceso de diálogo suspendido por un compás de espera hasta el martes entre choferes y el Gobierno.

“Con esta posición se deja indicado que las autoridades no tienen interés de solucionar los problemas, por lo que considero que se debió esperar la respuesta que dará el ministro de Industria, José Castillo Saviñón el martes”, manifestó.

Adujo que esa acción demuestra que el Gobierno no tiene interés de actuar con transparencia y de no someter al Congreso la modificación de la Ley 112-00 de Hidrocarburos.

Criticó que tras dos semanas de congelar los precios de los carburantes, se incrementen cuyo costo hoy día debe ser para el gasoil de $130, el GLP a $55, gas natural a $20 el metro cúbico, y de la gasolina premiun a $150.

Mientras  Quevedo ve la medida de Industria y Comercio como una “imprudencia”, porque se aplicó dentro de un diálogo con los transportistas que se reunieron con él titular de la cartera para que les repongan el subsidio de combustibles.

Precisó que esto se contradice con la posición del presidente Danilo Medina que ha reiterado de que su Gestión ayudará a todos los sectores productivos de la Nación, y expuso que el transporte es uno de los sectores más importante del país.

Refirió que el incremento no se ajusta con los precios del petróleo durante la semana, y precisó que el gasoil  debió aumentar $1.80.

Elnacional