El presidente Danilo Medina visitó en la tarde de ayer el proyecto Habitacional La Nueva Barquita, en el municipio Santo Domingo Norte.
El residencial, que será entregado a finales del presente año, fue ideado para beneficiar a los habitantes de La Barquita, quienes viven a orillas del río Ozama y desde que llueve sus viviendas quedan sepultadas por sus aguas.
Medina visitó el proyecto para percatarse de los avances de la primera fase de apartamentos.
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La visita de Medina al área en constrtucción se produce luego que un grupo de supuestos propietarios de viviendas del sector La Barquita realizaron una protesta la semana pasada frente a la Oficina de la Unidad Ejecutora para la Readecuación de La Barquita y Entornos (URBE), del referido barrio, para reclamar al gobierno la asignación de una casa, al igual que a los inquilinos.
El proyecto habitacional alojará unas 1,800 familias que pasarán de vivir en casas de zinc y hojalatas a apartamentos dignos, donados por el Gobierno, los cuales fueron censados.
Durante el recorrido, el presidente Medina estuvo acompañado por el padre Gregorio Alegría, enlace entre la Comisión para la Readecuación de La Barquita y esa comunidad. También por el ministro administrativo de la Presidencia, José Ramón Peralta; el empresario José Miguel González, responsable del proyecto.
Patricia Cuevas, coordinadora de la URBE, resaltó que la concepción y ejecución de este proyecto, concebido como un modelo de transformación social y humano, ha llamado la atención de organismos internacionales, que se han interesado en conocerlo.
El presidente Medina compartió y conversó con trabajadores de la obra, personal técnico e ingenieros, quienes le ofrecieron información sobre el avance de los trabajos.
El complejo consta de tres etapas. En la primera se levantarán 830 viviendas y 50 locales comerciales, en la segunda 800 casas y 40 locales comerciales y en la tercera un parque que a su vez solucionará los problemas de contaminación en la zona.
Los trabajos se iniciaron en el 2013 y se alojarán a personas que viven a orillas del río Ozama, quienes tendrán servicio de agua potable, politécnico, escuela, calles asfaltadas y una iglesia católica.
También contará con estaciones de bus, un centro cívico, defensa civil, estación de bomberos, destacamento policial, centro de atención primaria, anfiteatros, estancias infantiles, un circuito de parques y zonas deportivas, entre otras facilidades.