Un sacerdote católico de Pensilvania, Estados Undios, fue acusado de abusar de un menor después que la policía reportara que el religioso fue encontrado en un coche en un campus universitario con un adolescente de 15 años que no tenía puestos los pantalones, según los documentos policiales.El padre W. Jeffrey Paulish, fue acusado con un cargo de relaciones sexuales desviadas y un cargo por contacto ilegal con un menor, después de que la policía de Dunmore dijera que lo halló a él y al menor en un automóvil este jueves en el campus de Worthington Scranton de la Universidad Estatal de Pensilvania, según publicó CNN en español.
Paulish, de 56 años, también fue acusado con tres cargos de delitos menores: contacto indecente con una persona menor de 16 años, exposición indecente y corrupción de menores. Está siendo retenido en la cárcel de Lackawanna con una fianza de 50,000 dólares.
Oficiales de la policía de Dunmore dicen que descubrieron a Paulish y al chico tras responder a una llamada que reportaba un vehículo sospechoso, según la orden de arresto presentada a la corte.
Presuntamente, Paulish le dijo a la policía que estaba en el campus trabajando en su homilía cuando se encontró con el adolescente, quien estaba en una crisis emocional, y empezó a aconsejarlo.
De acuerdo con la declaración jurada, el sacerdote luego admitió a la policía que había organizado la reunión con el adolescente a través de la sección de “encuentros casuales” de Craiglist. Paulish dijo a los investigadores que le había preguntado tres veces al joven si era mayor de 18 años, dice la declaración.
Un mensaje telefónico que le envió CNN al abogado de Paulish, Bernard J. Brown, no ha sido respondido.
Paulish fue retirado de su puesto en la parroquia Prince of Peace y fue suspendido de ejercer como sacerdote, según un comunicado emitido por la Diócesis de Scranton.
La diócesis prometió su cooperación con la investigación, y pidió a cualquier persona que “pueda haber sido abusada sexualmente por el padre Paulish o a cualquier otro miembro del clero” notificar al fiscal del distrito.
“Reconozco lo inquietante que esto es para mí personalmente y para muchos otros, que una vez más un sacerdote esté implicado en una conducta tan inapropiada, inmoral e ilegal”, dijo en el comunicado el obispo de Scranton, Joseph Bambera.