Santiago. Junto al cúmulo de basura que se empieza a aglomerar en barrios y avenidas, la gestión que encabezará Abel Martínez heredará una deuda de 640 millones de pesos y varias obras inconclusas.Tan solo con las empresas recolectoras de basura, el presidente de la comisión de finanzas del concejo edilicio, el regidor Domingo Ureña, dijo que los compromisos superan entre 60 y 90 millones de pesos. Parte de esa deuda está repartida entre Urbaluz y Conwaste, dos de las empresas contratadas por la actual gestión municipal que encabeza el alcalde Gilberto Serulle, tras rescindir el contrato con Urbaser y Esensa.
Domingo Ureña explica que una gran parte de la deuda se le debe a contratistas y que algunos de estos datan desde la gestión de José Enrique Sued.
El 22 de mayo del 2012, el juez Samuel Guzmán de la Segunda Sala Civil, de este distrito judicial, condenó a la alcaldía de Santiago al pago de 28 millones de pesos a favor de la empresa Hoyo de Lima Industrial.
La decisión fue tomada luego que los abogados del cabildo local, no comparecieron al proceso tras varios meses de conciliación que al parecer fue burlada.
La deuda, contraída durante la gestión de José Enrique Sued, fue por 34 millones, pero que solo pudieron demandar por 28 millones, debido a que la actual administración se negaba a reconocer la deuda.
Otro de los problemas que deberá enfrentar la gestión que encabezará Abel Martínez, es la cantidad de obras de relevancia que llevan años paralizadas como la estación central del cuerpo de bomberos que inició Sued en la avenida 27 de Febrero y que se cumplen seis años sin que ni siquiera se le pusiera la mano.
Igualmente, quedará pendiente, el parque ecológico que bordea el sector El Ensueño y el barrio Los Pepines, que llevan un largo tiempo detenidas. La inversión municipal sería de aproximadamente 250 millones de pesos. Las obras de infraestructura del parque empiezan a ser arropadas por la hierba y los desperdicios.
Reconoce problemas
El pasado jueves, el alcalde Gilberto Serulle reconoció que dejaría a la nueva administración municipal una situación económica no muy halagüeña y anunció un conjunto de medidas que incluyen el despido de decenas de empleados para ajustar la nómina. “Quisiera dejar con la menor cantidad de deudas esta institución, aunque con relación a períodos anteriores, no será la más óptima, debido a que tuvimos que manejarnos con presupuestos deficitarios”, apuntó Serulle.
El Caribe