A su llegada a Río de Janeiro, el papa Francisco será recibido por la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, quien junto con sus homólogos latinoamericanos le brindará al sumo pontífice una recepción y regalará una escultura en cobre que representa un fraile leyendo un libro.
Papa Francisco encabezará Jornada Mundial de la Juventud. (Foto: sibci.gob.ve)
El papa Francisco le dijo este viernes a los jóvenes de Brasil y del mundo que «nos vemos en tres días» en Río de Janeiro (sureste), ciudad que visitará el próximo 22 de julio para participar en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ).
«Muchos de ustedes, queridos jóvenes, han llegado ya a Río y otros muchos están llegando en estas horas. Nos vemos allí dentro de tres días», manifestó Francisco en su cuenta oficial Pontifex.
A su llegada a Río el próximo lunes, el sumo pontífice se trasladará desde el aeropuerto carioca al Palacio de Guanabara (sede de Gobierno) donde la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, lo recibirá.
La mandataria brasileña encabezará la recepción oficial junto con su par argentina, Cristina Fernández, y otros jefes de Estados latinoamericanos invitados al evento.
Según la prensa brasileña, Rousseff ya eligió el regalo que le dará al papa, una escultura en cobre que representa un fraile leyendo un libro.
La obra, de 44 centímetros, fue realizada por el artista plástico brasileño Joao Turin, fallecido en 1949, y fue descubierta por la mandataria en junio pasado, en una exposición realizada en la sureña ciudad de Curitiba, la capital del estado de Paraná.
La agencia oficial ABR reseño que en esa ocasión los curadores de la muestra expresaron su deseo de que la escultura llegara a las manos del papa Francisco y, el lunes pasado, la obra llegó a la Presidencia de la mano de Samuel Ferrari Lago, responsable del acervo de Turin.
«No tengo dudas de que el regalo estará en buenas manos. La escultura es bellísima. La presidenta, cuando la vio, se paró para admirarla, e indagó todos los detalles. El hecho de haber elegido la escultura (para regalar al pontífice) es muy importante para valorizar a los artistas brasileños. Será un poco de Paraná, de Brasil, en el Museo del Vaticano», dijo Lago.
Entre tanto, más de 30 mil policías y militares serán movilizados del 22 al 28 de julio próximos, apoyados por helicópteros equipados con cámaras de filmación, informó una agencia de noticias internacional.
«Será la mayor operación policial jamás realizada en la historia de la ciudad», dijo el secretario adjunto de grandes eventos de Río de Janeiro, Roberto Alzir Dias Chaves.
En Río, el papa visitará la pequeña favela de Varginha, en la zona norte. Pero «los dos puntos calientes» en materia de seguridad son la célebre playa de Copacabana y la localidad de Guaratiba, a 40 km del centro, donde se movilizarán gran parte de los peregrinos.
En Copacabana tendrá lugar la fiesta de acogida de los jóvenes y el Vía Crucis de la JMJ, donde son esperados 1,5 millones de participantes.