El Proceso Indetenible de la Vida

Por José Cabral

La multiplicidad de opciones, problemas y sentimientos caracterizan la dinámica de cualquier sociedad, sin importar en que lugar del mundo se encuentre.

Unas sociedades luchan por conseguir lo que ya otras hace tiempo tienen, pero de cualquier modo hay metas y problemas que aún no han podido superar.

El deseo y los propósitos de unos, son logros de otros, lo que no implica, necesariamente, la prolongación de la vida biológica, pero si de amplias satisfacciones durante la existencia.

Terminar una carrera universitaria o hacer un negocio muy prospero no quiere decir que se haya logrado la felicidad, aunque constituya una meta muy importante.

Sin embargo, lo que más se acerca a la felicidad plena es aquella que proviene del amor puro y desinteresado, porque hay una etapa de la vida en que los bienes materiales pasan a un plano totalmente secundario.

Cientos de miles de seres humanos quisieran dar todas sus pertenencias a cambio de un buen estado de salud, pero la dinámica de la vida nos dice que por muchísimas razones, incluyendo la biológica, ya ese deseo no será complacido.

La dinámica de la vida nos indica  que la misma está conformada por felicidades e infelicidades, por logros y fracasos y por otras muchas facetas que independientemente de su voluntad nadie, absolutamente nadie, puede detenerla.

La vida es definitivamente muy compleja, pero no hay forma de cambiar su dinámica, porque siempre unos morirán mientras otros nacerán.

De igual modo, cuando unos ríen, otros lloran  y cuando muchos fracasan, miles triunfan, lo cual  nos dice que la dinámica de la vida es definitivamente muy contradictoria.

No entrar en conflicto con la conciencia, es sin lugar a dudas, una de las cosas que da más tranquilidad a la vida.

Pero el amor, así sea filial o carnal, es la savia más nutriente para aquellas almas que se alimentan cada día del elemento humano de la vida.

Ame aunque la dinámica de la vida esté llena de desamores y desprecios, porque así, sólo así, podrá apreciar la parte más sana de la existencia humana.

La dinámica de la vida muchas veces nos golpea muy duro, pero no respondamos con la misma moneda, sino que nos esforcemos por promover amor y armonía social.

Se debe ser realista y estar consciente de lo implacable de la dinámica indetenible de la vida, pero mantengan su deseo de irse a la última morada en paz con su conciencia y con el prójimo.

Ama hasta más no poder para combatir la pasada moda del amor, lo cual elimina la parte más bella de la vida con su carácter social y humano.

Así, sólo así, gozará de felicidad aunque no tenga bienes materiales.