Miguel Vargas, presidente PRD
SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Ante la búsqueda del diálogo para solucionar la crisis interna del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), el presidente de esa organización política, Miguel Vargas Maldonado, dijo que no se opone a la mediación, pero que la expulsión de Hipólito Mejía, Andrés Bautista y la suspensión de Orlando Jorge Mera y Geanilda Vásquez, no está en discusión.
“Nosotros somos amantes del diálogo, somos partícipe de todo lo que debe ser consenso y de todo lo que vaya en beneficio del pueblo dominicano y lo hemos demostrado. Estamos dispuestos al diálogo, pero en el marco del respeto, a lo que es la institucionalidad, las que son las decisiones del partido, las normativas estatutarias, las leyes y la Constitución. Aquí hay ya hechos consumados, aquí hay decisiones del Consejo Nacional de Disciplina del PRD y hay ratificaciones del Tribunal Superior Electoral (TSE), con respectos a sanciones. Nosotros estamos en la disposición de un diálogo, dejando claramente establecido que eso no esta en discusión”, expresó.
Señaló: “Pero cuál es el propósito del diálogo, qué retornen los expulsados. A mí me sometieron y me expulsaron el día primero de junio 11 días después de las elecciones. Yo llamé a una consulta nacional y la respuesta fue expulsarme, por lo que yo tuve que acudir a los tribunales y defenderme…y dejar bien claro que se me había irrespetado mis derechos y que no habían agotado en debido proceso, en cuanto a mí. Nosotros ahora hicimos el debido proceso…”.
Vargas Maldonado apuntó que: “Nosotros queremos participar en un proceso de convención, pero vamos a implementar el instrumento que nos va a dar claridad en ese proceso, que es el padrón de militantes del PRD”.
Miguel Vargas ofreció esta declaraciones al ser entrevistado en El Despertador del Grupo SIN, donde agregó que el conflicto del PRD tiene sus raíces en la “ambición desmedida continuista del que fue candidato presidencial”.
“Peña Gómez en el 1994 cuando ganó las elecciones y fue víctima de un fraude electoral y Balaguer le ofreció dos años de gobierno, él prefirió cambiar esos dos años por la no reelección presidencial consecutiva y se reformó la Constitución para eso…y en el gobierno del PRD, después de Mejía decir 82 veces que no iba y después de publicar un libro que se llamó “Mis palabras”, con el agravante de que sabía que el que tenía menos posibilidades de ganar las elecciones presidenciales era él…reforma la Constitución para poner únicamente la reelección, reelección presidencial que había sido principio en la fundación del PRD en el exilio…”aseguró.
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