Falta de políticas públicas y de educación causan caos tránsito

Por Elba García

En la República Dominicana ha estado en discusión cuál es la causa principal del caos que prevalece en el tránsito,mientras algunos consideran que el mismo  es el resultado de la falta de educación de los dominicanos.

Sin embargo, esta tesis queda totalmente desmentida cuando se observa la conducta del ciudadano en naciones donde la sanción por manejar desordenadamente es tan severa, como en los Estados Unidos y Europa.

 No resulta difícil concluir que la llamada cultura del caos en el tránsito es el resultado de la carencia de drásticas políticas públicas que sancionen a todo aquel que maneja sin respetar los preceptos establecidos por la ley sobre la materia.

El tránsito vehicular en la República Dominicana es una expresión de cómo están prácticamente todas las cosas en el país, dado que el Estado no ha dado demostraciones de eficiencia y capacidad de regulación, lo cual es un resultado de la carencia de institucionalidad.

Atribuir el desorden en el tránsito sólo a razones humanas, académicas y culturales, sin valorar que el fenómeno es fruto del desorden que predomina en todas y cada una de las instituciones que pertenecen al Estado, sería pecar de cierta ingenuidad.

El mejor ejemplo de que el caos en el tránsito en la República Dominicana es una consecuencia del desorden generalizada que afecta a la nación, fueron los buenos resultados que logró la Autoridad Metropolitana de Transporte cuando inició su operación, pero inmediatamente abandonó su filosofía por la influencia de algunos sectores de poder, se volvió igual que las demás y en la actualidad no pasa de ser lo mismo que los demás órganos oficiales, cuya principal característica es la falta de eficiencia, ética y escrúpulo en el desempeño de sus funciones.