NUEVA YORK.- Las autoridades migratorias bajo la administración de Joe Biden, saturadas por el ingreso masivo de inmigrantes durante gran parte del mandato demócrata, examinaron al dominicano -que ahora está acusado de herir a un agente fronterizo en Nueva York en un intento de asalto-, mediante una audiencia virtual, e ignoraron pasos clave en el protocolo de detención de indocumentados en la frontera, según recoge el New York Post.
Miguel Francisco Mora Núñez, de 21 años, fue uno de los casi 50,000 dominicanos que hicieron la llamada «vuelta por México» entre marzo de 2022 y diciembre de 2023, periodo en el que los agentes federales adoptaron medidas drásticas para liberar recursos mientras enfrentaban una oleada de inmigrantes.
Solo en el mes en que Mora Núñez cruzó la frontera suroeste de Estados Unidos hacia Arizona —abril de 2023—, los agentes fronterizos atendieron a unos 183,000 inmigrantes.
«Todo el sistema se vio abrumado por lo que permitía la administración Biden», dijo a The Post Charles Marino, exasesor principal de aplicación de la ley de la exsecretaria del DHS, Janet Napolitano.
«El objetivo final era facilitar el procesamiento de tantos ilegales en el país como fuera posible», agregó Marino.
Bajo ese contexto, los agentes de la Patrulla Fronteriza se auxiliaron de sus colegas en la frontera norte de Estados Unidos, quienes entrevistaron a los inmigrantes a través de la plataforma Zoom para acelerar su liberación, confirmaron fuentes policiales al medio neoyorquino.
Una fuente del Departamento de Seguridad Nacional criticó esta modalidad y aseguró que el interrogatorio virtual «fue una pesadilla» y que simplemente «no puede» garantizar una investigación adecuada.
El uso de Zoom para las entrevistas ya no se emplea, ahora que el ingreso ilegal de migrantes ha disminuido tras la ofensiva del presidente Trump.
En el caso de Mora Núñez, el dominicano fue liberado debido a la falta de espacio de detención en la frontera, con la indicación de que debía presentarse posteriormente ante un juez de inmigración, así como acudir a una oficina local del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), lo que, según las fuentes citadas por The Post, aparentemente no ocurrió.
Los agentes fronterizos que tuvieron contacto con Mora Núñez tampoco tomaron una muestra de ADN, lo cual es una práctica estándar —explica el diario— para determinar si la persona tiene antecedentes penales en Estados Unidos.
La ausencia de esta prueba se atribuyó a la escasez de hisopos en ese momento, según las fuentes.
Los agentes revisaron las bases de datos de las fuerzas del orden y, en ese momento, Mora Núñez no tenía antecedentes penales registrados.
Un juez de inmigración ordenó su deportación en 2023, luego de que no se presentara ante el tribunal, lo que nunca sucedió.
Durante estos últimos años en Estados Unidos, Mora Núñez acumuló varios arrestos en la ciudad de Nueva York y al menos uno en Massachusetts, pero fue liberado en cada ocasión. Las autoridades atribuyen esto a las políticas de «ciudades santuario» aplicadas en ciertas jurisdicciones demócratas como Nueva York.
Actualmente, está acusado de disparar en la cara a un oficial de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), de 42 años, durante un intento de robo fallido en Fort Washington Park, la noche del pasado sábado. El agente se encontraba sentado junto a una compañera en el parque.