Es la segunda medida de presión que realizan en poco más de un mes las tres empresas estatales del sector, Renfe, ADIF y FEVE, que afecta a los trenes de alta velocidad, de larga distancia y de Cercanías (suburbano).
Trabajadores del transporte ferroviario comenzaron este lunes una huelga de 24 horas en Madrid, capital de España, contra la liberalización del sector anunciada por el Gobierno de Mariano Rajoy, medida que los sindicatos consideran una privatización disimulada del servicio público.
Esta es la segunda medida de presión que realizan en poco más de un mes las tres empresas estatales del sector, Red Nacional de los Ferrocarriles Españoles (Renfe), Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) y Ferrocarriles Españoles de Vía Estrecha (FEVE), que afecta a los trenes de Alta Velocidad (AVE), de larga distancia y de Cercanías (suburbano).
Este paro coincide en la capital española con otros dos que están realizando los empleados del metro, en dos turnos de cuatro horas cada uno, contra la rebaja salarial y el exagerado aumento de las tarifas en el ferrocarril metropolitano.
Los diversos sindicatos catalogaron de abusivos el pago mínimo impuesto por las autoridades, que alcanza el 73 por ciento en los trenes del AVE y de larga distancia, el 65 por ciento para los interurbanos y el 75 por ciento para los de Cercanías en horas pico.
Con el paro convocado por los operadores ferroviarios 302 trenes de alta velocidad de larga y media distancia quedan fuera de servicio. En el caso de los trenes AVE y de larga distancia, de los 358 trenes circularán 261.
Un decreto aprobado el pasado mes de julio, apuntó que a partir del último día de ese mes quedaría liberalizado el transporte ferroviario nacional de pasajeros.
Con esta liberalización, el Ministerio de Fomento busca incrementar el número de operadores, ampliar el acceso de los ciudadanos a servicios de alta velocidad y aumentar las mercancías trasladadas. En tal sentido, los sindicatos denunciaron que los planes del Gobierno ponen en riesgo miles de puestos de trabajo.
El responsable del sector ferroviario de Unión General de Trabajadores (UGT), Jesús López, señaló que “la jornada transcurre con normalidad y una alta participación de lo poco que nos han dejado participar porque nos han impuesto unos servicios mínimos abusivos del 75 por ciento”.
Por su parte, la Izquierda Unida, a través de su secretario federal de Transporte, Medio Ambiente y Energía, Adolfo Barrena, mostró su “total apoyo a la huelga y las movilizaciones” (…) en defensa del empleo”.
Actualmente, en el sector ferroviario público español trabajan 28 mil 929 empleados, repartidos en ADIF (13 mil 224), Renfe (13 mil 848 trabajadores) y FEVE (mil 857).