La Arquidiócesis de Niteroi confirmó a través de un comunicado la suspensión del sacerdote mientras concluyen las investigaciones por «violación de vulnerable». En 2005, fue publicada una investigación en la que se descubrió que mil 700 sacerdotes en Brasil estaban implicados en abusos sexuales.

El religioso se presentó voluntariamente ante la Fiscalía de Río de Janeiro y negó haber abusado de la infante. (Foto: odia.ig.com.br)

La Iglesia católica suspendió temporalmente a un sacerdote brasileño por el presunto abuso sexual de una niña hace tres años. El religioso está siendo investigado penalmente, informó la delegada policial del caso Marta Domínguez.

La delegada policial explicó este martes que el presbítero Emilson Soares había sido acusado de «tocar las partes íntimas de una menor» que actualmente tiene 10 años de edad.

El presunto abuso ocurrió en Niteroi, región metropolitana de Río de Janeiro (sureste), donde Soares ejercía su sacerdocio antes de ser suspendido temporalmente por la Iglesia católica.

Según las autoridades, para la época en que ocurrió el hecho la presunta víctima tenía siete años y el sacerdote sostenía relaciones sexuales con la hermana de la niña.

“Había una relación afectiva, una práctica sexual consentida, por lo que no había violación”, dijo la funcionaria a la cadena de noticias brasileña O Globo. Sin embargo, la otra acusación involucra a una menor, por lo que la investigación es por «violación de vulnerable», precisó.

El religioso se presentó voluntariamente ante la Fiscalía de Río de Janeiro y negó haber abusado de la infante. Sólo admitió su relación con la hermana, que para la época tenía 19 años de edad, explicó a la prensa su abogado Roberto Vitagliano.

Soares “cometió un error y se responsabiliza por eso, pero no cometió delito alguno”, afirmó el defensor.

Asimismo, dijo que el acusado decidió acudir a la justicia luego que la familia de las dos hermanas realizara la denuncia y alegara tener como prueba un video en el que el religioso aparece teniendo relaciones sexuales con dos jóvenes en la casa parroquial de la iglesia Nuestra Señora del Rosario y San Benedicto de la ciudad de Niteroi.

En el video, algunas de cuyas tomas fueron reproducidas este martes por un diario local, el sacerdote aparece acariciando a una joven en un local que tiene como decoración una reproducción de la Santa Cena.

La Arquidiócesis de Niteroi confirmó a través de un comunicado la suspensión del sacerdote mientras concluyen las investigaciones.  «Obviamente el sacerdote no será responsable por ninguna parroquia, ya que fue totalmente separado temporalmente de sus funciones», indicó el texto.

El escándalo de sacerdotes involucrados en casos de pedofilia se desató en Brasil cuando la revista brasileña Istoé publicó en 2005 una investigación en la que se descubrió que mil 700 presbíteros estaban implicados en abusos sexuales a niños.

La investigación reveló que muchos de los implicados poseían de manuales para violar a infantes sin ser descubiertos y sus preferencias sexuales. «Me preparo para la caza, miro en torno con tranquilidad porque consigo los chicos que quiero sin problemas», reza uno de los manuales descubiertos en Brasil.

«Llueven chicos seguros y confiables que son sensuales y que mantienen un total secreto, que sienten la falta del padre y viven solos con la madre (…) Soy un seductor, seguro y calmo. Basta aplicar las reglas y el chico caerá en mis manos y seremos felices para siempre», escribió el sacerdote Tarciso Spricigo, uno de los autores del manual y que fue arrestado por haber violado a un niño de cinco años de edad.

De los mil 700 curas, el 10 por ciento son ordenados, el 50 por ciento no mantendría el voto de castidad y la Iglesia habría enviado a 200 sacerdotes a «clínicas psicológicas para ser reeducados». En las denuncias también se encontraba involucrado un obispo.