LA ROMANA. El Juzgado de la Instrucción Permanente ordenó tres meses de prisión preventiva contra Soraida Rodríguez, acusada de planificar el pasado año el asesinato de su madre Luz María Santana conocida como La China, empresaria dueña de una mina de caliche y otros negocios.
La audiencia se realizó a puerta cerrada. Teodoro Ursino Reyes fue el abogado de la parte acusadora, mientras que Héctor Avila representó a «Suli», de 44 años.
Mientras, la fiscal Jennifer Acevedo reveló a la prensa que hay otras personas implicadas en el caso ocurrido la tarde del 27 de septiembre de 2011.
El Ministerio Público presentó la transcripción de la llamada telefónica en la que Carlos José de Jesús Laureano, apodado Carlitos, quien guarda prisión preventiva como alegado autor material, menciona a Soraida Rodríguez en el hecho.
Sin embargo, Héctor Ávila dijo que se trata de «una simple referencia» de un joven que aparentemente se auto incrimina y que también pudo tratarse de una persona que hacía alardes de un hecho pasado para poder ser contratado.
A su salida de la sala de audiencias, Soraida Rodríguez, afirmó que se siente «tranquila» en cuanto a la acusación, mientras que señaló a una hermana suya como la responsable de su situación judicial.
Una hermana de «Suli», que reside en Estados Unidos, es quien mantiene la acusación contra Soraida Rodríguez.
El arresto de Rodríguez se produjo el pasado viernes en su residencia del Ensanche Quisqueya, donde además se hizo un allanamiento.
El crimen. En relación con el crimen de la empresaria, que era dueña de una mina de caliche, fue sometido hace poco el joven Carlos José de Jesús Laureano, «Carlitos», de 29 años, contra quien se ordenó prisión preventiva.
Historia del suceso. El asesinato se perpetró en la oficina de la víctima, en la calle Gregorio Luperón, próximo al liceo Tiburcio Millán López. La acusada, de 44 años, fue la primera en descubrir el cadáver.
La dama falleció a causa de asfixia por sofocación al ser amarrada de pies y manos, y luego de que le colocaran una soga de nylon en el cuello.
«La China» era el tronco de una conocida familia de tradición comercial. Su fallecido esposo Luis Rodríguez era apodado «Luis Surimat» por el bar y hotel que poseía, precisamente frente a donde ocurrió la tragedia.
En la escena del crimen las autoridades hallaron una toalla, color verde, con la que le taparon la boca, una sabana con manchas, un revólver marca S&M, calibre 38 milímetros, 394 mil pesos en efectivo, siete cadenas, 12 aretes, cinco anillos, una medalla, un reloj, dos guillos, todos de color amarillo. Se presume que del lugar cargaron con más de un millón de pesos. HOY