Los bombardeos israelíes contra las oficinas de varios medios de comunicación en Gaza dejaron siete comunicadores heridos. La Federación Internacional de Periodistas ha exigido a la comunidad internacional que investigue los ataques «deliberados» de Israel.
Las oficinas de los medios de comunicación en Gaza resultaron severamente dañadas tras ataque aéreo israelí. (Foto: RT)
El Ejército israelí nuevamente bombardeo el edificio Al Sharouk, que alberga las oficinas de muchos medios de comunicación en Gaza, lo que dejó como resultado al menos siete personas heridas. Además según algunos informes no confirmados un periodista fue asesinado.
La víspera, las fuerzas sionistas atacaron el centro de medios de comunicación en el centro de la ciudad de Gaza, lo que causó heridas a varios periodistas, a uno de ellos se debió amputar una pierna debido a la gravedad de las heridas..
De los cuatro misiles lanzados contra el edificio el domingo, uno alcanzó el piso donde está situada la oficina de RT en su versión árabe.
Según testigos, los edificios atacados fueron evacuados después del primer ataque, que fue seguido por al menos dos bombardeos más. Las oficinas de los medios de comunicación resultaron severamente dañadas.
Ante estas acciones de violencia, la Federación Internacional de Periodistas (IFJ, por su sigla en inglés) ha exigido a la comunidad internacional que investigue los ataques «deliberados» de Israel contra edificios de medios de comunicación en la franja de Gaza.
El presidente de la federación, Jim Boumelha, ha pedido a la Organización de Naciones Unidas (ONU) una «investigación en profundidad» de los ataques y ha exigido que se tomen medidas contra el Gobierno de Israel.
«La comunidad internacional debe responder inmediatamente contra este atropello», subrayó Boumelha, quien ha recordado que Naciones Unidas ha defendido en distintas ocasiones los derechos de los periodistas en zonas de conflicto.
«Los Estados miembros no puede mantenerse al margen cuando un Estado actúa de manera imprudente y peligrosa», enfatizó.
Por su parte, el Sindicato de Periodistas Palestinos (PJS) ha condenado los ataques, mientras que la Federación Nacional de Periodistas Israelíes (NFIJ), ha pedido respeto para la seguridad de los informadores.
Las autoridades israelíes han justificado los ataques al asegurar que el objetivo del Ejército «era derribar la antena de los edificios en los que se encontraban los medios», aunque algunos de los reporteros que se encontraban en el complejo han asegurado a PJS que tres plantas del edificio fueron bombardeadas.
El pasado 14 de noviembre, Israel emprendió ataques militares contra las infraestructuras de los que considera «terroristas» en la franja de Gaza. Estas acciones de violencia acabaron con la vida del jefe militar de Hamas, Ahmed Jabari.
Los ataques han causado hasta el momento al menos 100 víctimas mortales, la mayoría civiles palestinos.
Este lunes, el Gobierno sionista lanzó un ultimátum al Movimiento de Resistencia Islámico Palestino Hamas, amenazando con intensificar, aún más, su ofensiva militar sobre la Franja, si en las próximas 36 horas no se rinden y cesan los ataques con cohetes sobre presuntos objetivos israelíes.
Hamas ha asegurado que con los últimos ataques «Israel trata de buscar un altercado antes de las elecciones» general israelíes, que tendrán lugar en enero de 2013.
La franja de Gaza se encuentra actualmente bajo el control de Hamas, movimiento que ganó las elecciones en 2006. Posteriormente, en el 2007 Israel bloqueó la zona y sólo permite el paso de productos de primera necesidad.
A finales de 2008, a poco más de un mes para elecciones legislativas, el Estado israelí inició una ofensiva contra Gaza con el pretexto de frenar el lanzamiento de cohetes disparados supuestamente desde la frontera contra ciudades israelíes.
La ofensiva israelí fue denominada «Operación Plomo Fundido», que dejó un saldo de mil 400 palestinos muertos y cinco mil 500 heridos. Este, fue el ataque más sangriento en la región desde la Guerra de los Seis Días, en 1967.