Jonny Ventura no Tuvo Fronteras

Por José Cabral

La muerte de Johnny Ventura impacta de una forma muy especial a la sociedad dominicana, porque es el creador de una obra imperecedera.

Johnny fue un artista marca país, porque el merengue no es cualquier música, sino aquella que representa rítmicamente y étnicamente al dominicano.

El merengue originalmente se tocó con güira, tambora y acordeón, el primero de cuyos instrumentos provenía de los aborígenes, el segundo de los ancestros africanos y el tercero de Alemania.

Esos tres instrumentos tenían su origen de lugares de donde viene la formación étnica dominicana, es decir, que no existe ninguna duda de que ambos tienen su origen en los tres continentes que conforman la dominicanidad.

Europa, África y los indios tainos, nativos de la República Dominicana, país perteneciente al continente americano, son el resultado de la composición étnica del criollo, lo que explica que cuya mayoría de la población sea mulata como consecuencia de la liga entre estas razas.

Pues, Johnny Ventura, Huchi Lora y otros preocupados por la historia, la cultura y la música crearon y montaron una magnifica obra teatral,  con el auspicio de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que llevó como nombre ¨¨Opera Merengue¨¨.

Esa producción, protagonizada por Johnny Ventura y con un elenco que superaba los sesenta miembros, se montó en el teatro nacional y posteriormente fue llevada a Nueva York y se presentó en el United Palace, localizado en la calle 175 y Broadway.

Ese proyecto artístico me permitió conocer la grandeza artística de Johnny Ventura, porque después de hacer esfuerzos para montarla en Broadway, se logró llevar a ese teatro que en ese momento se usaba como iglesia del reverendo Ike.

La cuestión es que cuando Johnny me pidió que viera ese lugar quedé impresionado porque se trataba de una réplica de la Escala de Milán.

Pero en realidad la experiencia más impresionante del montaje de esta obra en Nueva York fue cuando se intentó conseguir el patrocinio de Américan Airlines con la colocación de su publicidad a cambio de más de sesenta boletos de avión, el encargado de esa línea aérea en el Caribe se alarmó y se negó a participar en el evento porque él entendía que había que destinar un avión para transportar a los artistas del elenco de ¨¨Opera Merengue¨¨.

Este también fue el motivo por lo que el principal productor de Broadway, quien montaba en ese momento una obra muy famosa llamada Cat, dijo que él no podía asumir los costos del transporte y pago de hotel en la gran urbe.

El asunto es que cuando quien escribe le explica lo ocurrido a Johnny Ventura, él de inmediato propone visitar nuevamente al ejecutivo aéreo y se produjo la tremenda sorpresa de que cuando a éste le anunciaron la presencia del artista, salió de su oficina cantando y bailando uno de los merengues más famosos del ahora fallecido ícono de la música popular dominicana.

Es decir, que la sola presencia de Johnny sirvió para que un ejecutivo de una línea aérea decidiera patrocinar el evento con sesenta boletos de avión, pese a que él no hablaba español, solamente inglés, lo cual fue una muestra de que Johnny Ventura rompió todas las fronteras como protagonista principal de la música popular dominicana.

Johnny Ventura no se olvidará nunca, porque su carisma y su condición de artista marca país lo coloca por encima de cualquier defecto o error cometido para convertirlo en un gigante tan grande que absorbe a prácticamente todo lo que esté a su alrededor.

Que descanse en paz ese grande de la música popular dominicana y rey del merengue Johnny Ventura.