WASHINGTON. (EFE).- La misión especial de la Organización de los Estados Americanos (OEA) para Haití llegará a Puerto Príncipe este domingo con el objetivo de facilitar el diálogo político y social tras la suspensión de la segunda vuelta electoral.
La misión, aprobada en el Consejo Permanente este miércoles, estará encabezada por el presidente de turno en ese órgano, el representante de Antigua y Barbuda ante la OEA, Ronald Sanders, informó el organismo hoy en un comunicado.
El secretario general de la OEA, Luis Almagro, subrayó que la solución “debe ser acordada por los haitianos”, y pidió al presidente del país, Martelly, y al presidente del Senado, Jocelerme Privert, que “el mecanismo de gobierno que se adopte cuando concluya el mandato de Martelly el próximo 7 de febrero sea lo más breve posible” y esté refrendado por la Corte Suprema”.
La misión de la OEA, solicitada por Martelly, tiene por objetivo “colaborar para lograr un entendimiento entre los haitianos” y para ello establecerá un diálogo con los principales representantes políticos y sociales de Haití.
El Consejo Permanente de la OEA recibirá un informe de la misión cuando ésta concluya su trabajo en Puerto Príncipe, una fecha que por el momento está abierta.
Integrantes de la misión
Completarán la misión Leónidas Rosa Bautista, representante ante la OEA, excanciller y ex fiscal general de Honduras; Sonia Johnny, exrepresentante de Santa Lucía ante la OEA; Gabriel Bidegain, asesor político principal del secretario general; y Steven Griner, director del departamento de Sustentabilidad Democrática y Misiones Especiales del organismo.
Este equipo contará además con el apoyo de Frederic Bolduc, representante especial del secretario general en Haití.
Martelly solicitó por teléfono el envío de esta misión al secretario general de la OEA, Luis Almagro, para “preservar la institucionalidad democrática” y con base en el artículo 17 de la Carta Democrática Interamericana.
El Consejo aprobó el envío de la misión este miércoles tras cuatro horas de reunión en las que no hubo votación sino que el presidente del órgano concluyó que, de las posiciones expuestas, se extraía que había un “consenso” para atender la solicitud del Gobierno haitiano.
En el turno de intervenciones, expresaron su apoyo abierto a la petición haitiana las otras 14 naciones que integran la Comunidad del Caribe (Caricom), México, Perú, Costa Rica y Canadá.
Estados Unidos, Chile y Colombia fueron menos explícitos pero dejaron entrever que, de haber consenso para la misión, se sumarían.
Venezuela, Nicaragua, Honduras, Ecuador y Brasil se opusieron a que la OEA tomara esta decisión, cuando los cancilleres y jefes de Gobierno de 32 de los 34 países miembros estaban debatiendo el mismo asunto en la IV Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) que se inauguraba ese día en Quito.
La Celac aprobó poco después ese mismo día una misión de cancilleres para conocer la situación electoral de Haití a petición del Gobierno del país caribeño.