La suspensión es la segunda sanción que Waiters recibe esta temporada.
El equipo anunció la suspensión el domingo, tres días después de que Waiters, de acuerdo con una persona con conocimiento de la situación, fuera tratado por una emergencia médica que se generó en el vuelo de Phoenix a Los Ángeles.
De acuerdo a varias fuentes periodísticas Waiters consumió un comestible con cannabis, lo que le provocó una reacción tan seria como para requerir ayuda médica en cuanto el avión aterrizó.
“Estamos muy decepcionados por las acciones de Dion (Waiters) esta temporada, incluyendo la situación del jueves y estamos agradecidos de que no pasó a mayores”, manifestó el equipo en un comunicado.
Waiters fue suspendido al inicio de la campaña tras varios incidentes en la pretemporada y por sus problemas con el entrenador de los Heat, Erik Spoelstra.
Su reacción en Twitter tras la primera sanción tampoco fue bien recibida por la directiva, y el base no ha jugado ninguno de los nueve partidos que el equipo de Miami ya ha disputado en lo que va de la nueva temporada.
La suspensión de 10 partidos, que le costará 834.483 dólares ( 756.934 euros) de su salario, se inició con la derrota del viernes ante Los Ángeles Lakers. Waiters podría volver el 1 de diciembre, cuando Miami visite a los Nets de Brooklyn.
El escolta de los Heat está en su cuarta temporada con el equipo de Miami, que en el 2017 le dio un contrato por cuatro años y 47,3 millones de dólares ( 42,9 millones de euros), más cinco millones de dólares por incentivos ( 4,54 millones de euros).
Waiters no ha estado cerca de llevarse esas bonificaciones, y necesitaría jugar en 70 de los restantes 73 encuentros de Miami para ganar el 1,1 millón de dólares extra ( 998.000 euros), algo que ya no podrá conseguir tras la suspensión que ha recibido.
Miami ha ganado seis de nueve duelos sin el escolta, su mejor marca desde el 2012, y tendrá cinco encuentros seguidos contra equipos con marca perdedora.