Los niños y adolescentes palestinos sienten miedo por los ruidos de los aviones que les genera pesadillas frecuentes. Además, 47,6 por ciento de los menores de 12 años y un 18,3 por ciento de los adolescentes, entre 13 y 17 años, afirman que se orinan en la cama durante sus horas de sueño muestra del severo trauma.
Unicef ha puesto en marcha 21 espacios familiares en Gaza para ayudar a madres y niños que viven en estrés por ataques israelíes. (Foto: EFE)
Más del 80 por ciento de los niños palestinos de la franja de Gaza viven con angustia y miedo a causa de los ocho días de ataques aéreos israelíes contra esta región, que dejaron más de 100 muertos, cientos de heridos y daños materiales por valor de 300 millones de dólares, reveló en su estudio el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, por su sigla en inglés).
El estudio, en el que también participó el Centro Palestino para la Democracia y Resolución de Conflictos explica que el 62,2 por ciento de los niños menores de 12 años de edad sienten angustia, el 88 por ciento miedo y el 64,8 por ciento dificultades para concentrarse.
Para evaluar el impacto que ha tenido en la infancia la reciente operación israelí, denominada «Pilar Defensivo», Unicef encuestó a unos 545 niños y adolescentes palestinos, la mitad niños y niñas, entre los pasados días 24 y 25 de noviembre.
Según la investigación, la angustia y el miedo se presentan con más frecuencia en edades comprendidas entre los 13 y los 17 años, una franja de edad en la que el 87,6 por ciento de los entrevistados dijo sentir angustia, el 99,4 por ciento, miedo y el 87 por ciento, falta de concentración.
Además, el 92 por ciento de los niños menores de 12 años y el 94,7 por ciento de los adolescentes entre 13 y 17 años dicen asustarse con los ruidos y el 70 por ciento, en ambas franjas de edad, aseguran tener pesadillas con frecuencia.
El 47,6 por ciento de los menores de 12 años afirman que se orinan en la cama por las noches, en un porcentaje que es del 18,3 por ciento en el caso de los adolescentes entre 13 y 17 años.
La portavoz de Unicef, Marixie Mercado, señaló que la media habitual de niños con problemas de enuresis nocturna es del 5 por ciento a los 10 años.
Esta situación es muestra del «estrés psicosocial y el severo trauma emocional» de los niños de Gaza a causa de los «ocho días de hostilidades con las fuerzas armadas israelíes», enfatizó Mercado.
Para contrarrestar este estrés psicosocial, Unicef ha puesto en marcha 21 espacios familiares en Gaza para ayudar a madres y niños que viven en continúo asedio israelí.
Otros 15 centros han sido instalados para ofrecer a los adolescentes actividades recreativas como: deportes, teatro, música y arte.
Además, Unicef ha hecho un llamado a la comunidad internacional para recaudar 7,6 millones de dólares para ayudar a la población de Gaza. De esta cifra, tres millones de dólares serán destinados a la protección de los infantes y a sus necesidades sociales y psicológicas.
El resto estará destinado a la compra de suministros médicos y farmacéuticos, la reparación de escuelas (en torno a un centenar) y el acondicionamiento de redes hospitalarias y suministros de agua.
Retorno a la «calma»
Raquel Martí, directora ejecutiva de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) señaló que pese a que una semana después del cese de la ofensiva «Pilar Defensivo» sobre la franja de Gaza, los niños traumatizados por lo vivido han retornado a sus actividades, «sigue habiendo falta de medicamentos y personal sanitario para atender a los numerosos heridos que dejaron ocho días de bombardeos».
Desde el pasado sábado, la agencia humanitaria ha reabierto sus 245 escuelas, 18 de las cuales resultaron dañadas por los bombardeos, lo que ha permitido que 225 mil menores puedan volver a las aulas.
Los niños son siempre los «más afectados», por lo que es importante que «reanuden cuanto antes suactividad normal para poder superar la situación traumática» que han vivido, subrayó.
Los niños de Gaza tienen «secuelas psicológicas muy graves y solo se pueden superar a largo plazo», indicó.
En la Franja de Gaza viven 1,6 millones de personas, de las que 1,2 son refugiados palestinos que dependen de la UNRWA. De estos últimos, según ha indicado Martí, 800 mil están recibiendo ayuda alimentaria de la agencia de la ONU, ya que no tienen ningún medio de subsistencia debido al bloqueo impuesto por Israel sobre este territorio desde 2007.
«Antes atendíamos a un número mucho menor», resaltó.
El pasado 14 de noviembre, Israel inició una ofensiva con el asesinato del líder del movimiento de Hamas, Ahmed Yabari. El Ejército israelí lanzó unos mil 500 bombardeos en respuesta a un ataque con cohetes lanzado supuestamente desde Gaza contra el sur del territorio israelí.
A finales de 2008, el Estado israelí también emprendió una ofensiva contra Gaza con el pretexto de frenar el lanzamiento de cohetes disparados supuestamente desde la frontera contra ciudades israelíes.
La ofensiva israelí fue denominada «Operación Plomo Fundido», que dejó mil 400 palestinos muertos y cinco mil 500 heridos. Este, fue el ataque más sangriento en la región desde la Guerra de los Seis Días, en 1967.
Previó a esa operación, Israel bloqueo la zona y ha impedido a los ciudadanos palestinos que ejerzan sus principales derechos, entre ellos el trabajo, la salud, la educación y la libertad de circulación.