Según medios árabes, el acuerdo estipula el envío de al menos cinco mil hombres para reforzar a los grupos armados sirios que combaten contra las Fuerzas Armadas de Siria para buscar derrocar al presidente de ese país, Bashar Al-Assad.
El presidente sirio, Bashar Al-Assad ha denunciado el financiamiento por parte de Estados Unidos a insurgentes sirios con armamento bélico (Foto:Archivo)
Un líder de la rama de Al Qaeda del sur de Yemen (sur de Asia) habría llegado a un acuerdo con Estados Unidos y Arabia Saudita para el envío de cinco mil combatientes del grupo terrorista a Siria con el fin de respaldar a los grupos armados y derrocar al presidente Bashar Al-Assad, según informan agencias de noticias del Oriente Medio.
La información fue difundida por la agencia de noticias iraní AlAlam y el diario digital yemení AdenAlghad.net.
Dichos portales dieron a conocer que Tariq al-Fadhli, un entrenador militante yihadista que luchó junto a Osama Bin Laden, presuntamente acordó con funcionarios estadounidenses y sauditas el envío de militantes a territorio sirio, a través de Turquía, para “ayudar a los rebeldes a luchar en la guerra» para sacar del poder a Bashar Al Assad.
Se conoció que estos militantes se unirían en Siria con otros grupos de combatientes de Al Qaeda que se han ido infiltrado en el país desde Libia, Irak y Turquía, con la ayuda de la OTAN y otros países del Golfo Pérsico.
De acuerdo a la agencia AlAlam, Al-Fadhli es descrito como “uno de los ancianos de la tribu de Abyan y ex líder de Al Qaeda”. Asimismo, el diario estadounidense, The New York Times, reseñó que en Yemen “está catalogado como uno de los terroristas más peligrosos del país”.
De este modo, Al Qaeda, que es considerada un grupo terrorista por parte de los Estados Unidos, casi repite las declaraciones de los funcionarios estadounidenses que llaman al finalizar la presidencia de Bashar Al-Assad que, según su criterio, “perdió su legitimidad” y comete crímenes contra su pueblo.
El rotativo británico, The Guardian difundió información que los combatientes de Al Qaeda estaban a cargo de un sector de los rebeldes sirios y les enseñaban cómo construir bombas, mientras Washington continúa la colaboración con la oposición armada en el país.
El presidente Al-Assad ha denunciado en reiteradas ocasiones y ha presentado pruebas de que los grupos armados que intentan derrocar al Gobierno sirio han recibido dotaciones de armamento y municiones durante las últimos semanas con el financiamiento de naciones del Golfo Pérsico y bajo la coordinación de Estados Unidos