EFE
CARACAS. La oposición venezolana cumplió 50 días de protestas contra el presidente Nicolás Maduro, que no retrocede en su propuesta de convocar una asamblea nacional constituyente y llamó al chavismo a prepararse para ganar en ese escenario.
Este sábado, opositores y chavistas volvieron a medir fuerzas en las calles de Caracas, así como en distintas ciudades del país, que desde el 1 de abril son escenario de manifestaciones que han dejado al menos 46 muertos, aunque el gobernador del estado Miranda (centro), Henrique Capriles, asegura que ya son 50 los fallecidos.
Los opositores se congregaron en las principales ciudades en una actividad denominada “Somos millones”, con la que, según habían anunciado, buscaban la “mayor demostración de fuerza” que hayan dado en casi dos meses de protestas.
Pero tal como ha ocurrido en las últimas semanas, los manifestantes fueron dispersados con gases lacrimógenos por las fuerzas de seguridad, especialmente en Caracas y en los estados de Anzoátegui (este) y Táchira (oeste).
En Táchira se encontraba el primer vicepresidente del Parlamento, el opositor Freddy Guevara, quien expresó su apoyo a los “gochos”, como se les conoce a los oriundos de esa zona, y aseguró que “inspiran a toda Venezuela”.
En ese estado, fronterizo con Colombia y donde el Gobierno denunció el pasado miércoles la captura de “paramilitares colombianos”, se puso en marcha hace tres días la fase dos del Plan Zamora, con el envío de más de 2.000 integrantes de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militarizada).
“Estamos, como todo venezolano, por apoyar un país con democracia, para la libertad de nuestros hijos y nuestros nietos”, dijo a Efe Norka Duque, una mujer de 61 años, quien, entre lágrimas, se lamentó de la actual situación y dijo estar en las calles para que haya “justicia para un país que se lo merece”.
Esta mujer era una de las decenas de personas que acudieron a la plaza Altamira, en el este de Caracas, uno de los puntos de concentración de la oposición, que luego convocó a marchar hasta la sede del Ministerio de Interior, en el centro, departamento al que los opositores responsabilizan de la represión en las protestas.
“Estamos luchando por el futuro de esos niños, porque no queremos tampoco que nuestros niños se vayan del país. Este es su país”, comentó a Efe Mildred Berríos, de 50 años.
Por su parte, Maduro pidió al oficialismo que se prepare para ganar la Constituyente, que convocó como una salida a la crisis que vive el país y que él mismo calificó como “el camino de la paz”.
“Vamos a postular a los mejores líderes (…) a prepararnos para ganar la Constituyente, que es el camino de la paz”, afirmó el gobernante en un contacto telefónico con trabajadores del sector alimentario que marcharon hoy en Caracas en apoyo a este proceso de reforma de la Constitución.
Según Maduro, la Constituyente tiene que ser “de alegría, de movilización”.
La canciller de Venezuela, Delcy Rodríguez, advirtió por su parte de que la actual coyuntura que vive el país tiene la “marca del Pentágono”.
“Ustedes saben bien que la coyuntura que hoy se presenta en Venezuela no es una coyuntura que sea hecha en Venezuela; tiene marca imperial, tiene marca del Pentágono”, advirtió Rodríguez en un acto oficialista.
El pasado 1 de mayo, Maduro llamó al “poder constituyente originario” para que convoque a un proceso Constituyente para vencer “el golpe de Estado” del que acusa a la oposición, pero la fiscal general, Luisa Ortega Díaz, advirtió en una carta difundida por medios locales que cambiar la Constitución “aceleraría la crisis”.
Sobre la posición de la fiscal, Capriles aseguró hoy que el pueblo venezolano respaldará a las instituciones que cumplan las leyes, haciendo alusión específica al Ministerio Público.
“Tenemos hoy un Ministerio Público (MP, Fiscalía) que está dando claramente una señal de institucionalidad en el país, lo que hay que reconocer públicamente”, afirmó el dirigente del partido Primero Justicia.
Capriles insistió en que estos 50 días de manifestaciones dejan “más de 13.000 heridos, más de 2.700 personas detenidas y casi 200 civiles que han sido procesados en los tribunales militares”.
“En 50 días ha ocurrido prácticamente una masacre contra el pueblo venezolano, pero ante más represión, más resistencia”, subrayó.