Los cinco antiterroristas cubanos fueron privados de su libertad desde 1998 por Estados Unidos.
El Comité Internacional por la Libertad de los Cinco, es la organización que ha estado trabajando en el caso de los cinco cubanos apresados en 1998 por Estados Unidos, de los cuales tres de ellos aún continúan privados de su libertad. Dicho comité hace un llamado a todos los amigos de Cuba en el mundo para que acompañen una jornada de denuncia y solidaridad que se inicia este miércoles en Washington DC.
La III Jornada Cinco días por los Cinco, organizada por dicho grupo, persigue aumentar la presión política a favor de una solución definitiva a los casos de Gerardo Hernández, Ramón Labañino y Antonio Guerrero, tres de los cinco antiterroristas cubanos que aún permanecen en prisiones federales estadounidenses. El grupo de cinco fue apresado cuando seguían a conjuntos de ultraderecha que en geografía norteamericana planeaban y ejecutaban acciones terroristas contra Cuba.
Un boletín del Comité pidió que en los diferentes países se realicen acciones paralelas del 4 al 11 de junio, «incluyendo plantones, manifestaciones, pronunciamientos, exposiciones, tuitazo general, artículos en los medios y activación de las redes sociales».
Según fuentes consultadas por la cadena Prensa Latina, hasta el momento el comité ha organizado un conjunto de actividades simultáneas en más de 40 naciones.
Esta jornada es precedida por la Comisión de Investigación sobre el caso de los Cinco, que sesionó en marzo en Londres (Reino Unido). Ambas actividades constituyen las dos acciones principales a favor de esta causa en lo que va del 2014.
Es oportuno recordar, que los cinco antiterroristas cubanos fueron llevados a juicio y se les inventó el cargo de poner en peligro la seguridad de Estados Unidos, por lo que se les juzgó como espías y fueron condenados a desmesuradas penas desde 15 años, hasta doble cadena perpetua más 15 años, esta última impuesta a Gerardo Hernández.
Del quinteto, sólo dos: René González y Fernando González abandonaron la prisión, pero después de purgar sus injustas sentencias (15 años y 17 años más nueve meses, respectivamente).