La reunión de la CEPAL.
SAN SALVADOR.- La Comisión Económica para América Latina (Cepal) clausuró este viernes su XXIV período de sesiones en San Salvador con el compromiso de los Estados de trabajar para sacar de la pobreza extrema a unos 73 millones de latinoamericanos.
«Hay (en Latinoamérica) 174 millones de pobres, de los cuales 73 son de pobreza extrema. Por de pronto comencemos por sacar de la pobreza extrema a los 73 millones de latinoamericanos», planteó la secretaria de la Cepal, Alicia Bárcena, durante el acto de clausura del foro.
Para lograr ese objetivo, Bárcena aseguró que los países de la región deben diseñar cuanto antes políticas concretas dirigidas a esos ciudadanos, antes de aspirar a metas más ambiciosas en el plano social.
«Sesenta años más tarde (de la creación de la Cepal por parte de la ONU en 1948) impulsamos ahora, desde San Salvador, una ambiciosa propuesta, que funde experiencias y aprendizajes pasados con los desafíos que la sociedad contemporánea nos impone», expresó Bárcena.
La funcionaria destacó que los países de la región disponen ahora de una «visión integrada de desarrollo» que articula las dimensiones económica, social y ambiental. El encuentro de la Cepal impulsó también «transformaciones cualitativas» en la estructura productiva de los países de la región.
«Para diversificar la economía hacia sectores con mayor valor agregado y generar encadenamientos productivos, necesitamos un Estado proactivo en políticas industriales, que fortalezca a las micro, pequeñas y medianas empresas, que promueva el salto en investigación y desarrollo (…)», destacó Bárcena.
En ese sentido, la secretaria de la Cepal sostuvo que «toda la región comparte que la única forma de consolidar la democracia» en la región es «aspirando a la igualdad», en una población de cerca de 600 millones de habitantes, entre América Latina y el Caribe, donde el desafío es atender a los más pobres.
«El empleo es la llave maestra de la igualdad», precisó Bárcena, pero éste debe ser un «empleo con derechos», con «seguridad social» y sostenibilidad ambiental para no comprometer el futuro de las generaciones.
Por otra parte, la CEPAL ratificó el compromiso de los países de integrarse más para desarrollar mejores mercados intrarregionales ante la caída de la demanda externa de los países desarrollados.
Bárcena abogó porque la región pueda tener una mejor relación con Asia Pacífico, con Africa, el mundo árabe y otras «regiones dinámicas».
Dentro de esa visión estratégica, la vuelta a un mayor «protagonismo» de los Estados para equilibrar la ecuación entre mercado y sociedad, ha sido bien recibida por los países tras la crisis económica y financiera de 2008, puntualizó.
Para la Cepal, a la región le ha costado retomar el sendero del crecimiento después de la crisis de la deuda sufrida a comienzos de los años 80 del siglo pasado.
Las positivas tasas de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) alcanzadas entre 2003 y 2010, de 3,8% en promedio regional, no lograron equipararse a las de la década de los años 70, de 5,7%.
Tras resistir los embates de la volatilidad mundial, Latinoamérica podría cerrar 2012 con un crecimiento económico promedio de 3,7%, según el organismo.
Almomento.net