También está en riesgo el gasto en educación y salud (Foto:Archivo).
El recorte presupuestario provisional aplicado este viernes en Estados Unidos afectará a los sectores más desfavorecidos del país pues los 85 mil millones de dólares recortados disminuirán las gastos destinados al Programa de Seguro Médico Infantil, los cupones de alimentos y las ayudas de viviendas para los más pobres y discapacitados.
Según publicó este lunes el diario estadounidense The New York Times con estos recortes se ponen en riesgo las viviendas de 125 mil personas.
En tanto que el secretario de Educación del país, Arne Duncan, remarcó que 10 mil profesores podrían perder sus empleos y que también serán perjudicados los programas de atención a niños pobres y con necesidades especiales.
Esta rebaja de gastos significa un ocho por ciento de la partida de defensa (46 mil millones de dólares) y de cinco por ciento del resto del presupuesto, lo que supone una pérdida de 750 mil empleos y la reducción de medio punto porcentual en el crecimiento de la economía norteamericana.
La Casa Blanca informó además que el recorte provisional afectará también a los veteranos de guerra, quienes dejarán de cobrar sus cheques, a miles de familias que se quedarán sin ayuda escolar o atención sanitaria, 800 mil empleados civiles del Pentágono y 10 mil maestros que serán enviados temporalmente a sus casas.
El recorte presupuestario fue acordado entre republicanos y demócratas hace un año para evitar el abismo fiscal debido al déficit público del país. Sin embargo, los dos partidos no pudieron ponerse de nuevo acuerdo para realizar otro arreglo que no impacte tan drásticamente en la población.
El presidente estadounidense, Barack Obama, afirmó este viernes que los recortes son severos y estúpidos. Además remarcó que » ante la ausencia de determinación de parte del presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, y de otros líderes a la hora de colocar los intereses de las familias de clase media por encima de la política, estos recortes entrarán en vigor”.
Obama buscaba alcanzar un acuerdo con los republicanos, quienes son mayoría en la Cámara de Representantes, para que se evite el abismo fiscal a través de nuevos impuestos a las personas con mayores ingresos, lo que es rechazado por sus opositores.
Ante la negativa republicana, el presidente indicó que no es un dictador sino un presidente y que no puede forzar al Congreso a “que tome buenas decisiones”.
Para evitar que estos recortes entren en vigor, los republicanos y demócratas tienen hasta el 27 de marzo, fecha en que se aplicará la medida.