Santo Domingo.- Los presuntos asesinos del artista José Carlos Hernández Hernández pertenecen a la organización denominada los «mega metal».
Así lo consigna la Fiscalía del Distrito Nacional, que detalla que previo al crimen el imputado Máximo Darvin Almánzar Guerra (a) Warrior le lanzó una bofetada, manifestándole «¿Qué haces aquí?».
Posteriormente, Hernández y Oscar Alberto Ricard Arzeno fueron atacados a cuchilladas por los imputados Miguel Ángel Bautista Mota (a) La Bola, Máximo Darvin Almánzar Guerra (a) Warrior, Jesaias Benjamín Mota Lorenzo (a) El Niño, junto a El Prototipo, Mancebo y Dominic, quienes tras cometer los hechos emprendieron la huida a bordo de un vehículo.
Según la Fiscalía, de la investigación realizada «se desprende que estamos en presencia de un crimen de odio, por el prejuicio que denota la conducta de los imputados, al existir coincidencia en gusto de la música y la diferencia de clases».
Mientras que dos hombres de los tres declarados prófugos por el crimen se entregaron ayer a la Policía para investigarlos en torno al hecho de sangre ocurrido la madrugada del domingo, afuera de la discoteca Gustavo Live Pub, ubicada en la avenida Winston Churchill esquina José Amado Soler de esta capital.
Jorge de Jesús Mancebo, quien vive en la calle Francisco Segura y Sandoval, de Los Mina, se entregó el martes en la noche, mientras Kelvin Eduardo Cuevas Pineda (Dominic), se entregó a las 9 de la mañana de ayer en el Palacio de la Policía.
Los dos relataron por separado a los investigadores cómo ocurrieron los hechos la madrugada del domingo frente a la discoteca «Gustavo Live Pub», en la avenida Winston Churchill esquina José Amado Soler, en la urbanización Fernández.
Según los investigadores, Mancebo dijo que en el asesinato de Hernández fueron utilizados un cuchillo tipo Rambo, marca Taiwán, de diez pulgadas, una chaveta, un pedazo de madera y una sevillana.
En ese sentido, Mancebo ratificó que en el lugar donde se cometió el crimen estaban Máximo Darvin Almánzar Guerra (Warrior), de 23 años; la novia de éste, Cristi Lorena Sánchez, de 20; Miguel Ángel Bautista Mota (El Bola), de 24; Josaías Benjamín Mota Lorenzo (El Niño), además de Jorge de Jesús Mancebo, Kelvin Eduardo Cuevas Pineda y otro joven sólo conocido como Prototipo.
Siempre de acuerdo con los investigadores, Mancebo agregó que la novia de Warrior sufrió una crisis nerviosa y se echó a llorar cuando un joven apodado El Brujo, junto a otro conocido como El Chileno se le acercaron y el primero le dio un beso en la mejilla derecha. Narró que Warrior le preguntó qué pasaba y su novia le respondió que El Brujo, uno de los hombres que la habían violado, la saludó.
En los interrogatorios practicados a Dominic y Mancebo, estos coincidieron en que tras la llegada de José Carlos, Warrior, novio de Cristy Lorena Sánchez de 20 años, la emprendió si mediar palabras a cuchilladas con el artista y otros dos le ayudaron a cometer el crimen.
Mancebo habría dicho a los investigadores que aunque los demás se oponían a que Hernández fuera agredido, Warrior, el novio de la joven supuestamente violada, insistió en cobrar venganza con los amigos de los violadores.
El Cardenal
El arzobispo Nicolás de Jesús Cardenal López Rodríguez condenó ayer el asesinato del joven José Carlos Hernández, hijo del fenecido merenguero Jochi Hernández y de la presentadora de televisión María del Carmen Hernández. «Es vergonzoso ver asesinar a una gente joven tan vulgar, sádica, y perversamente no tiene ningúna justificación. Indiscutiblemente que quien odia es capaz de cualquier cosa», dijo,
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