Rafael Palmeiro, cuestionado por sustancias controladas.
Samuel Sosa tiene muy poco chance de ir a Cooperstown.
NEW YORK. Para este próximo 9 de enero los escritores de béisbol habrán dado su dictamen final y será el día que se anunciará quién o quiénes serán la venidera clase del 2013 al Salón de la Fama en Cooperstown.
Mucho se ha dicho y escrito sobre que nadie espere en América Latina que se anuncien entre otros a Rafael Palmeiro y Sammy Sosa, que debieron estar entre los inmortales del deporte, pero por su uso de sustancias controladas, pasará mucho tiempo para que sean evaluados a una posible posteridad.
Este año la única esperanza de sangre latina, lo es por cuarta ocasión en la boleta el nombre de Edgar Martínez.
«El señor Mariner», como muchos le conocen, en especial sus seguidores en el estado de Washington, volvemos una vez más a recalcar su carrera con los Marineros de Seattle y porque es hora que se le honre como uno de los mejores bateadores derechos en la historia del béisbol organizado.
Martínez, quien fue leal por 18 campañas a la organización de Seattle, es todavía hoy su líder de todos los tiempos en seis categorías ofensivas y segundo en otras cuatro.
En su historial obtuvo dos títulos de bateo; siete veces un Todo Estrella; un cinco ocasiones Bate de Plata y en el 2004 le fue galardonado el Premio Roberto Clemente. En 1995 obtuvo una gran temporada, arribando tercero en la votación para Jugador Más Valioso de la Liga Americana, pero bien hay que hablar que fue el hombre que le dio una nueva definición de excelencia al rol de bateador designado.
En sus días de jugador activo obtuvo en cinco ocasiones el premio del bateador designado del año en su circuito americano.
Fue por su destreza en ese trabajo que hoy muchos le consideran el mejor bateador designado de todos los tiempos. Incluso, el mismo béisbol organizado le dio su nombre para la perpetuidad a partir del 2005 al honor de Bateador Designado del Año. Su persona es tan querida en Seattle que si usted manda hoy a comprar su boleto por el lado sur del Safeco Field, está caminando por el ‘Edgar Martínez Drive’.
Para algunos, su rol de bateador designado a tiempo completo continua siendo de discusión, pero si sus sueños se convierten en realidad, sería el primero en la historia en tal rol, en ser electo al Salón de la Fama.
En realidad no debería haber discusión, siendo uno de muy pocos peloteros en la historia en cerrar su carrera con sobre .300 de promedio de bateo, sobre .500 de promedio de slugging, sobre 300 cuadrangulares y sobre 500 dobles conectados. Su promedio de .417 de promedio en ocasiones en base es el más alto por un latinoamericano en la historia del béisbol.
Otro que está en el debate de que si puede 2013 pueda ser su año, es en su segundo turno en la boleta Bernie Williams. Otro grande que en 16 temporadas con los Yanquis de Nueva York fue un cinco veces Todo-Estrella y cuatro ocasiones Guante de Oro. Además, campeón bate en 1998 de la Liga Americana; cerró su carrera en los Yanquis como uno de líderes en nueve categoríaas ofensivas y, posiblemente junto a Manny Ramírez, como uno de los mejores latinos en post-temporada en la historia del gran circo. En este momento paciencia y ver que el tiempo nos dirá. (Hogar del béisbol latino)
Diario Libre