Foto de archivo. Fuente externa.
COMENDADOR, Elías Piña. Pese al conflicto y a la tensa situación prevaleciente desde hace varios en Dajabón, se desarrolla con toda normalidad el tradicional mercado binacional que se celebra lunes y viernes de cada semana en este municipio, desde hace mas de 15 años.
Desde las primeras horas de la mañana de este viernes cientos de comerciantes haitianos de ambos sexos, tras la apertura del portón colocado en el puesto fronterizo de Carrizal en este municipio, por parte de efectivos del Cuerpo Especializado de Seguridad
Fronteriza Terrestre (CESFRONT), comenzaron a ingresar a territorio dominicano cargando en sus hombros, vehículos, motocicletas y a lomo de animales, una diversidad de bienes y servicios.
Tras cruzar la línea fronteriza, los comerciantes haitianos y haitianas se dirigen al edificio que aloja las oficinas de la Dirección General de Aduanas (DGA), ubicadas a pocos metros del portón de entrada de los extranjeros, pagan sus respectivos impuestos y se internan en unos terrenos habilitados para esos fines a pocos metros de la línea divisoria y en toda la parte exterior del mercado municipal local.
De su lado, el coronel Sugar Frugis Martínez, comandante de la tercera brigada del Ejército Nacional con asiento en San Juan, reiteró que en toda la franja fronteriza donde le corresponde comandar, desde Guayajayuco, punto que lo separa de la quinta brigada destacada en Mao Valverde, hasta la 204, en Hondo Valle, unos 137 kilómetros, la situación es “completamente normal”.
No obstante, agregó que se ha reforzado la vigilancia a todos los movimientos de los extranjeros para que quienes ingresan, regresen a su país, según lo informado un oficial de los asignados a esa tarea.
De acuerdo a informaciones ofrecidas por oficiales que prestan servicios en esta ciudad, en principio se discutiób la posibilidad de que miles de haitianos indocumentados aprovecharan el mercado para penetrar en masas a este municipio y desde aquí continuar ruta hacia otros pueblos, pero finalmente se decidió permitirles el ingreso a los comerciantes bajo vigilancia.
El desarrollo de esos mercados binacionales se ha convertido en la principal actividad económica no solo para esta provincia, sino para cientos de personas de distintos puntos del país que lunes y viernes de cada semana se trasladan a la zona a comprar y vender distintos bienes y servicios.
A esto hay que agregar los cientos de hombres y mujeres, conductores de motocicletas, propietarios de camiones, camionetas y de animales que rentan a los haitianos sus servicios para el transporte de mercancías desde el río Carrizal, que divide a ambos países, hasta las instalaciones de la Dirección General de Aduanas y luego al mercado local para su puesta en venta.
Muchos haitianos y haitianas comienzan a traer mercancías un día antes del intercambio, domingos y jueves, la almacenan en casas rentadas y de amistades para luego los lunes y viernes sacarlas y venderlas en distintos puntos de esta ciudad, según se ha podido comprobar.
Aunque la inmensa mayoría de los comerciantes haitianos y haitianas que tradicionalmente comercializan mercancías son muy sumisos y solo hablan entre ellos, varios no quieren que sus nombres aparezcan en medios de comunicación, informaron a este diario.
Indicaron que pese a la situación que se ha presentado en Dajabón con compatriotas suyos, continuaran intercambiando mercancías con dominicanos en este municipio.
“Nosotros nos sentimos bien aquí, entramos, pagamos los impuestos en esa oficina”, refiriéndose a Aduanas. HOY