El Gobierno de Bashar Al Assad ha afirmado que existe una campaña mediática y manipuladora que acusa a las fuerzas sirias de atacar a la población civil. Asegura que esas acusaciones complementan el apoyo que Occidente le da a la oposición con el fin de derrocar al jefe de Estado de la nación árabe.
Gobierno sirio ha reiterado ser víctima de un plan extranjero de desestabilización. (Foto: eleconomista.com.mx)
El Gobierno de Siria desmintió las acusaciones hechas por la prensa extranjera sobre un presunto ataque contra un parque infantil en Damasco (capital), supuestamente «perpetrado» por fuerzas sirias y que dejó al menos 10 niños muertos.
El corresponsal de teleSUR en Siria, Hisham Wannous informó este martes que «la prensa extranjera dijo que aviones del Ejército sirio atacaron con bombas de racimo a un parque de juego y que acabo con la vida de 10 niños. Estas informaciones fueron desmentidas por el Gobierno».
El Ejecutivo «afirma que esto es parte de una campaña mediática, manipuladora, que complementa el apoyo occidental a la coalición opositora, formada recientemente en Catar», reportó Wannous.
Como parte de este apoyo a la oposición siria «Francia ha destinado un millón 200 mil euros (un millón 552 mil dólares) con el fin de derrocar al Gobierno de Bashar Al Assad, bajo excusas humanitarias», señaló.
Entre tanto, el Ejército sirio continúa este martes su ofensiva contra los grupos armados en diferentes provincias de la nación árabe, «causando grandes pérdidas en sus filas», indico el periodista.
«Fuentes militares dieron a conocer que unos siete mil insurgentes, en su mayoría mercenarios extranjeros se agruparon en la localidad de Dar’a (suroeste) en la provincia de Damasco desde el pasado 15 de noviembre con el fin de lanzar un ataque contra el Palacio Presidencial y así controlar la capital», reportó.
Las fuerzas sirias «le hicieron frente a los armados empleando diferentes armas y dejando unos mil 500 terroristas muertos, así como un sin número de heridos, mientras cientos de armados se entregaron a las autoridades entre ellos pilotos de nacionalidad jordana», señaló Wannous.
Por su parte, en la provincia de Deir ez-Zor (sureste) «unidades del Ejército sirio liquidaron este martes a un grupo armado, que robaba petróleo y traficaba carros cisternas hacia Turquía», informó el corresponsal.
Al norte del país, «el Ejército descubrió un refugio de armamentos de un grupo perteneciente al Frente Al Nusra, aliado de la red Al Qaeda», agregó.
El Gobierno sirio ha reiterado ser víctima de un plan extranjero de desestabilización y ha mostrado al país y al mundo pruebas de células pertenecientes a grupos extremistas, que han intentado sembrar el caos a través de asesinatos y disturbios contra ciudadanos y autoridades de orden público desde marzo de 2011.
Países como Catar han afirmado que los grupos armados en Siria deben ser ayudados con «todos los medios necesarios».
La administración catarí se ha mostrado a favor de entregar armas a la oposición siria, que ha encabezado los disturbios para derrocar el Gobierno de Bashar Al Assad.