La oposición, decidida a mantener las presiones de calles para lograr la realización de elecciones generales y la remoción de los magistrados del máximo tribunal, convocó este jueves a nuevas protestas en la capital y otras ciudades del interior.
Miguel Antonio Colmenares, de 36 años, murió la noche del martes cuando se encontraba en una manifestación en la ciudad central de Barquisimeto, estado Lara, confirmó la Fiscalía en un comunicado.
El Ministerio Público y la policía judicial iniciaron una investigación sobre el deceso de Colmenares, quien habría sido asesinado al parecer por integrantes armados de un «colectivo» -simpatizantes del gobierno- quienes le hicieron varios disparos de arma de fuego cuando observaba una protesta callejera, declaró Edgar Sira, primo del fallecido, al diario regional El Impulso.
La víspera, Brayan Principal, de 13 años, murió en Barquisimeto por una herida de bala disparada por supuestos «colectivos» en una manifestación.
Dos universitarios de 19 y 20 años, murieron el 6 y 10 de abril, respectivamente, en los estados Miranda y Carabobo en manifestaciones callejeras. Por los dos casos fueron detenidos tres policías que son señalados como presuntos responsables.
Las manifestaciones casi diarias de las últimas dos semanas contra el gobierno de Nicolás Maduro y el Tribunal Supremo de Justicia han dejado cuatro fallecidos, varias decenas de heridos y 135 detenidos en todo el país.
En medio del contexto de crispación política, Maduro -cuya popularidad ronda el 20%- enfrentó el martes una tensa situación al final de un acto oficial en la población suroriental de San Félix, estado Bolívar, cuando centenares de personas se abalanzaron sobre el vehículo militar descapotado en el que trasladaba, y algunos le lanzaron objetos contundentes y le gritaron insultos.
El mandatario expresó la víspera, sin dar detalles, que sus opositores «habían preparado una emboscada y el pueblo se encargó de deshacerla», y agradeció a los habitantes del poblado pobre de San Félix las expresiones «de amor y de apoyo que recibimos».
Las tensiones políticas se agitaron en Venezuela a raíz de dos sentencias que emitió en la última semana de marzo la Sala Constitucional del máximo tribunal en la que asumió las competencias legislativas de la Asamblea Nacional y limitó la inmunidad de los diputados.
A pesar de que el tribunal revirtió en abril los dos dictámenes que quitaban facultades al Congreso, se mantienen las protestas en reclamo de la realización de elecciones generales, la remoción de los magistrados que emitieron el fallo contra los legisladores, la liberación de los presos políticos, la apertura de un canal humanitario para alimentos y medicinas y el respeto al Congreso.