La estabilidad y la seguridad de la compañía Aramco están directamente relacionadas con la de su propietario: el gobierno saudita y su familia gobernante. AP
Washington.- El presidente de EE.UU., Donald Trump, autorizó ayer domingo la liberación de reservas de petróleo del país para que, si es necesario, garanticen el suministro mundial, impactado por los recientes ataques contra refinerías saudíes.
“Con base en el ataque contra Arabia Saudí, que puede tener un impacto en los precios del petróleo, he autorizado la liberación de petróleo de la Reserva Estratégica, si es necesario, en una cantidad que aún debe ser determinada y que sea suficiente para mantener los mercados bien abastecidos”, dijo Trump en Twitter.
“Preparado”
El Departamento de Energía ya había adelantado en un comunicado que EE.UU. estaba “preparado” para tomar esas medidas en respuesta a lo ocurrido en Arabia Saudí.
Allí, dos refinerías saudíes de la petrolera estatal Aramco, la principal del mundo, fueron atacadas con diez drones el sábado, lo que ha supuesto una reducción de cerca del 50 % en su producción, aunque Riad ha asegurado que cubrirá la demanda de sus clientes con inventarios. Los ataques fueron reivindicados por los rebeldes hutíes yemeníes, apoyados por Irán; pero, el sábado, el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, responsabilizó directamente a la República Islámica.
Ante el posible impacto económico de esos incidentes, Washington ha comenzado a coordinarse con la Agencia Internacional de la Energía (AIE), un organismo creado tras de la crisis del petróleo de 1973, para ver qué “posibles opciones están disponibles en caso de que se necesite tomar una acción colectiva global”, detalló el Departamento de Energía estadounidense.
Ese departamento controla la Reserva Estratégica de Petróleo (SPR, por sus siglas en inglés), que cuenta con la mayor provisión de crudo para casos de emergencia de todo el mundo.
Esas reservas de petróleo, propiedad del Gobierno de EE.UU., se encuentran en unas enormes cavernas subterráneas en la costa del Golfo de México, específicamente en los estados de Texas y Luisiana.
SEPA MÁS
Acusaciones. Tanto Riad como Washington acusan a Teherán de financiar y armar a los insurgentes hutíes del Yemen en violación del embargo de armas de la ONU.
Yemen. La guerra en el Yemen es escenario de un pulso de poder entre Teherán y Riad. El conflicto se recrudeció en marzo de 2015.