Trump habló con el rey saudí al término de una semana de intensa diplomacia en la región por parte del secretario de Estado de EEUU, Rex Tillerson, que visitó Kuwait, Catar y Arabia Saudí con el objetivo de acercar a las partes, aunque sin lograr frutos claros.
“Los dos líderes (Trump y el rey Salman) hablaron sobre los recientes esfuerzos diplomáticos para resolver la disputa con Catar, y subrayaron la importancia de cumplir los compromisos de la cumbre de Riad” que el presidente estadounidense lideró a mediados de mayo, indicó en un comunicado la Casa Blanca.
“En particular, el presidente enfatizó la necesidad de acabar con todos los fondos para el terrorismo y desacreditar la ideología extremista”, añade la nota.
Al inicio de la crisis diplomática en junio, Trump se posicionó a favor de los países -Arabia Saudí, Egipto, Emiratos Unidos y Baréin- que se han enfrentado a Catar, al que acusan de apoyar al terrorismo y al que han impuesto un bloqueo terrestre, marítimo y aéreo.
Trump instó entonces a Catar a dejar de financiar el terrorismo y volver “a la comunidad de naciones responsables”, lo que entorpeció el intento del Departamento de Estado de adoptar una posición neutral, debido en parte a que en el emirato catarí se encuentra la mayor base militar estadounidense en la región.
En un claro contraste con las declaraciones de Trump, Tillerson ha presionado más al cuarteto árabe que a Catar, al pedirles que suavizaran su bloqueo e insinuar que la trifulca tiene menos que ver con el supuesto apoyo catarí al terrorismo que con otros roces entre los vecinos del Golfo.
La portavoz del Departamento de Estado, Heather Nauert, dijo este jueves que Tillerson logró “avances sutiles” en sus cuatro días de gestiones diplomáticas en el Golfo, al considerar que el mero hecho de haber “hablado con ambas partes” es “un paso importante en la dirección adecuada”.
El rey saudí también felicitó hoy a Trump “por la victoria contra el Estado Islámico (EI)” en la ciudad iraquí de Mosul, liberada esta semana después de tres años controlada por los yihadistas, según el comunicado sobre la llamada que el presidente estadounidense hizo mientras volvía a su país desde Francia. EFE