Unión Europea prohibirá el secreto bancario el próximo año

La medida busca mejorar la recolección de impuestos

BRUSELAS, Bélgica, (EFE).- La Comisión Europea (CE) anunció a principios de semana la  entrada en vigor en 2013 de la nueva normativa destinada a mejorar la recolecta de impuestos en los Estados miembros de la Unión Europea y el intercambio de información entre las autoridades fiscales, a través de medidas como la prohibición del secreto bancario.

La directiva de «Cooperación Administrativa» en el ámbito de la fiscalidad pone las bases para una colaboración más estrecha y para un mejor intercambio de información entre las autoridades fiscales de los Estados miembros, según destacó la CE en un comunicado.

Uno de los aspectos clave de la directiva que entrará en vigor el próximo 1 de enero es la prohibición del secreto bancario, impidiendo que los Estados miembros puedan negarse a dar información que esté en manos de una institución financiera y haya sido solicitada por otros países, subrayó la Comisión.

La directiva, adoptada por la CE el pasado día 6, incluye otras novedades, como fórmulas y procedimientos comunes para el intercambio de información entre los Veintisiete o la posibilidad de que los inspectores fiscales de un país participen en investigaciones en otro Estado comunitario.

El comisario de Fiscalidad, Aduanas y Anti-Fraude, Algirdas Semeta, afirmó que estas nuevas normas «permitirán una mayor transparencia, mejor intercambio de información y una cooperación más estrecha», puntos que definió como «fundamentales» para combatir la evasión fiscal.

La nueva normativa afectará a todos los tipos de impuestos salvo aquellos que ya son cubiertos por otra legislación comunitaria, como es el caso del IVA.

El próximo día 1 también entrarán en vigor precisamente las nuevas reglas comunitarias sobre el IVA, adoptadas en 2010 y destinadas a simplificar la aplicación de este impuesto para las empresas.

En particular, pretenden favorecer un ahorro de 18.000 millones de euros anuales mediante la introducción de procedimientos de facturación electrónicos.

Los Estados miembros también podrán ofrecer a las empresas que facturen menos de 2 millones de euros anuales la posibilidad de acogerse a un «régimen de compatibilidad de caja», que les permitiría declarar y hacer efectivos los pagos del IVA cuando reciban los ingresos por ventas, y no cuando los facturan.

Semeta señaló que esta normativa servirá para «simplificar los procedimientos, reducir los costes y aplicar las soluciones que mejor se ajustan a las necesidades de las empresas».