El secretario de prensa de la Casa Blanca, Jay Carney, fue consultado sobre la posibilidad de suspender, temporalmente, los comicios, y precisó que sí es posible, pero la decisión no depende del presidente Barack Obama, sino del Congreso nacional.
La Casa Blanca aclara que la decisión depende del Congreso nacional (Foto: AP)
La Casa Blanca no descarta la posibilidad de tener que aplazar las elecciones presidenciales, pautadas para este martes seis de noviembre, debido a las fuertes y severas consecuencias que dejó el paso de la tormenta post-tropical Sandy por la costa este de los Estados Unidos.
El secretario de prensa de la Casa Blanca, Jay Carney, fue consultado sobre la posibilidad de suspender, temporalmente, los comicios, y precisó que sí es posible, pero la decisión no depende del presidente Barack Obama, sino del Congreso nacional.
“El Congreso establece la fecha para la elección presidencial: el martes posterior al primer lunes de noviembre, cada cuatro años. El Parlamento podría actuar la próxima semana para cambiar la fecha, pero ello sería difícil porque los legisladores están en receso y de regreso en sus distritos haciendo campaña para su reelección”, detalló.
La tormenta ya provocó que que los candidatos suspendieran temporalmente sus campañas electorales, así como también imposibilitó la votación anticipada en algunas estados del país., debido a las inundaciones y apagones masivos, que dejaron sin electricidad a más de ocho millones de hogares.
Las autoridades han explicado que restablecer el suministro eléctrico en algunas áreas puede tardarse días e, incluso, quizás no se concrete totalmente antes de los comicios, dificultando el proceso.
En ese sentido, sobre la posibilidad de posponer la elección sólo en algunos estados, Carney resaltó que, aunque es posible, la ley federal dice que “si un estado no puede realizar una elección de contiendas federales en el día que escoge el Congreso, la legislatura estatal puede escoger otra fecha”.
Argumentó también que el aplazamiento supondría más dificultades en los estados que tienen previsto celebrar también elecciones locales, ya que deberían llevar a cabo dos jornadas electorales.
El portavoz presidencial agregó que una solución podría ser extender las horas de votación en los lugares donde se utilizan máquinas electrónicas, o también utilizar boletas en papel.
“Algunas áreas podrían mover sus casillas electorales si las existentes están dañadas, son inaccesibles o no tendrán energía eléctrica el día de la votación”, aseveró.
El funcionario, sin embargo, añadió que de extenderse el horario, debido a una ley aprobada por el Congreso en 2002, tras la disputada elección presidencial de 2000, “cualquier votante que se presente fuera del horario regular debe utilizar una boleta provisional, las cuales son contabilizadas posteriormente y pueden ser impugnadas”.
Según la agencia EFE, el balance parcial de «Sandy» incluye al menos “40 víctimas mortales, más de seis millones de hogares aún sin electricidad y cuantiosos daños materiales, aunque la actividad económica y de transporte en la zona trata de recuperar su ritmo”.