El descaro ya no tiene límite en la política vernácula y en esa desviación ahora está incorporado el presidente Luis Abinader.

Santo Domingo, RD.-El descaro de los políticos dominicanos ha llegado al colmo y de cuya aberración no puede ser excluido el presidente Luis Abinader, quien acaba de convertirse en candidato por el Partido Cívico Renovador, el cual sabe ubicarse muy bien en la sombra del poder y venderse al mejor postor y no está de mas recrearse con lo pedido por el jefe de esa organización, Jorge Zorrilla Ozuna, cuando juramentó al mandatario como  aspirante a reelección: “Jura usted darnos la oportunidad de nosotros ser parte del tren gubernamental desde ahora y también para después”, fueron las palabras que utilizó el supuesto dirigente político.

Lo peor de este desvergüenza fue la respuesta dada por el mandatario al tránsfuga que ha creado un partido político para encaramarse en el poder a cualquier precio.

“Hasta la victoria, con Dios y la fuerza de la unión”, concluyó el también exjefe del Ejército Nacional y quien en los gobiernos del Partido de la Liberación Dominicana fuera director del Instituto Nacional de Estabilización de Precios.

El acto, que correspondía a la Cuarta Asamblea Nacional Extraordinaria y Convencionaria de Delegados “Don Andrés Rodríguez Portorreal”, tuvo lugar en el Club Mauricio Báez.

Previo a la proclamación de la candidatura del mandatario, los asambleístas conocieron varias resoluciones, entre ellas, las candidaturas reservadas ante la Junta Central Electoral (JCE).

Tras la juramentación, Abinader expresó que formarán “un gran frente de partidos aliados para que siga el cambio en la República Dominicana”.