Santiago, RD.-Con el propósito de evitar un mayor contagio, todas las entradas y salidas de San Francisco de Macorís fueron ocupadas ayer por un contingente de tropas militares y policiales que ya impusieron una restricción sobre la circulación de personas y vehículos.
A la ciudad solo pueden entrar personal de los organismos de socorro, medios de comunicación debidamente acreditados, y vehículos que distribuyen combustibles, alimentos y medicinas.
La tensión creció ayer en San Francisco de Macorís cuando se informó de que el director regional de Salud Pública con asiento en esa ciudad, Angel Federico Garbot, dio positivo al coronavirus y que fue trasladado a un centro de salud de Santo Domingo.
Contrario a días anteriores, en San Francisco de Macorís, casi todos los negocios estaban cerrados ayer y pocas personas circulaban por las calles, debido al control policíaco-militar existente.
Muchas personas de la provincia Duarte dicen que pese a lo que está ocurriendo en la zona, otras tantas se resignan a quedarse en sus casas, pero que lo están haciendo obligatoriamente por la vigilancia existente.
Las autoridades de Salud Pública en San Francisco de Macorís explicaron que la situación es mucho más grave de lo que se prevé.
En horas de la mañana, las calles lucían casi desoladas y después de las dos de la tarde la situación se agravó.
Muchas personas se quejaron de que desde antes de las 4.00 de la tarde, unidades militares y policiales reforzaron los operativos y que les advertían a los que conversaban en los frentes de sus residencias ó en las aceras que en 30 minutos todas tenían que recogerse en sus hogares.
Residentes de San Francisco de Macorís llamaron a programas interactivos de esa ciudad y Santiago para denunciar que lo que ocurre allí es “una dictadura”.
“A mi hijo y dos amigos de la Universidad se los llevaron presos porque conversaban frente a sus casas a las 7.00 de la noche en el barrio San Martín, en San Francisco de Macorís”, se quejó una dama que llamó al programa radial “En el mismo blanco”, de Santiago.
Otras personas, sin embargo, consideran positivas las medidas de las autoridades de intervenir la provincia Duarte y parte del Noreste, pero entienden que se les debe permitir trabajar, aunque con ciertas medidas de prevención.
Las entradas ocupadas por las fuerzas militares y policiales son las que comunican y salen a la autopista Duarte con destino a Santo Domingo y Santiago, la de Tenares y Salcedo, Nagua, y las que enlazan a municipios y distritos municipales de la zona.
Según el Ministerio de Salud Pública, Santo Domingo, el Distrito Nacional, Santiago y San Francisco de Macorís ocupan los cuartos primeros lugares en casos de coronavirus.
Pero médicos dicen que la situación es mucha más grave en San Francisco de Macorís, porque su espacio es más pequeño que las tres primeras ciudades mencionadas y que allí hay más aglomeración de personas.
A este respecto, el asesor y expresidente de la regional Norte del Colegio Médico Dominicano (CMD), Manasé Peña, dijo que en lo que respeta al Gran Santo Domingo y Santiago, casi todo se distribuye por zonas y que por eso la aglomeración de personas es menor.
Al respecto, observó que debido a la cantidad de habitantes que tienen Santo Domingo, el Distrito Nacional y Santiago, los casos de coronavirus de San Francisco de Macorís, en comparación a población, superan individualmente los que se han comprobados en esas tres grandes urbes dominicana.
La provincia Duarte, especialmente su municipio cabecera, San Francisco de Macorís, se ha convertido en la primera población golpeada por el impacto de la transmisión comunitaria, con 59 casos confirmados y 12 de las 20 muertes que han ocurrido en el país, para un 60% de las defunciones registradas.
Testimonios de personas afectadas e impactadas por muerte de algún familiar narrando las condiciones dramáticas en las que se encuentran aumentan y por diferentes medios, incluyendo personal de salud que aseguran los centros médicos registran una alta cantidad de infectados.
De las 12 defunciones ocurridas en San Francisco de Macorís, nueve pacientes tenían más de 60 años y alguna enfermedad crónica, de acuerdo a los detalles dados a conocer por el ministro de Salud Pública, doctor Rafael Sánchez Cárdenas.
Las autoridades, apoyados por los organismos de socorro del país al municipio, con una desinfección masiva, incluyendo al centro de salud privado Siglo XXl, traslado de positivos y contactos a áreas de aislamientos, ampliación de los recursos de tratamiento y aumento de los diagnósticos.
Cárdenas explicó que en esa provincia se han establecido niveles de aislamiento de pacientes positivos, sintomáticos, asintomáticos y contactos directos para evitar contagios.
Explicó que las personas han sido ubicadas en un habitacional de 10 conjunto de apartamientos, separando los positivos leves o asintomáticos, los sintomáticos sin pruebas y los positivos sintomáticos.
El aislamiento, advirtió, se extenderá a todos los municipios y provincias que sea necesario, igual que las cuarentenas, toque de queda y cierre de municipios y provincias. Por otro lado, Cardenas negó que la paciente de Villa Rivas fue la responsable del foco de transmisión comunitaria.