Latinoamericanas
A Trump no le será fácil desarticular apertura hacia Cuba
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9 años agoon
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LA REDACCIÓN
AP
LA HABANA. La apertura del presidente estadounidense Barack Obama hacia Cuba en el 2014 ayudó a canalizar dólares estadounidenses a conglomerados turísticos manejados por los militares isleños mientras el aparato de seguridad reprime el disenso.
El acercamiento también hizo llegar millones de dólares a negocios privados, impulsando el crecimiento de una clase media emprendedora independiente del estado comunista. Se abrió un nuevo mercado para firmas estadounidenses como JetBlue y American Airlines, que tienen hoy resplandecientes oficinas en La Habana, y Airbnb ofrece decenas de miles de alojamientos privados en la isla.
La internet es hoy una realidad al alcance de cientos de miles de cubanos pues el presidente Raúl Castro cumplió la promesa que le hizo a Obama y abrió casi 400 puntos de acceso a Wi-Fi en el país. Paralelamente, viejos enemigos separados por 145 kilómetros (90 millas) de agua firmaron acuerdos para cooperar en una cantidad de áreas, que van desde el tráfico humano hasta los derrames de petróleo.
El sucesor de Obama, Donald Trump, encara un complejo escenario al ser presionado por legisladores cubano-estadounidenses y por cabilderos para que cumpla su promesa de dar marcha atrás con las políticas de Obama hacia Cuba. El gobierno estadounidense se apresta a anunciar una nueva política que prohibiría los negocios con los militares cubanos al tiempo que preservaría las relaciones diplomáticas plenas restauradas por Obama, según un funcionario de su gobierno y una persona involucrada en la elaboración de esa política.
“Como ha dicho el presidente, la actual política hacia Cuba es un mal negocio. No hace lo suficiente para apoyar los derechos humanos en Cuba”, expresó el vocero de la Casa Blanca Michael Short. “Pronosticamos un anuncio en las próximas semanas”.
Se siguen debatiendo nuevas restricciones a los viajes de placer de los estadounidenses a Cuba, que se han más que triplicado desde el anuncio de Obama, hasta llegar a casi 300.000 visitantes el año pasado.
Los cubanos anticastristas de Estados Unidos no quieren que los turistas estadounidenses disfruten de mojitos en un estado policial que mandó al exilio a miles de personas que dejaron sus casas y sus negocios. Las leyes estadounidenses siguen prohibiendo el turismo a Cuba y para visitar la isla hay que encajar en alguna de 12 categorías contempladas por el gobierno, que van desde asuntos religiosos hasta actividades educativas diseñadas para promover el contacto de los visitantes con los cubanos.
Cuando asumió Obama, los viajeros solo podían ir a la isla como parte de viajes organizados, una medida que garantizaba que los estadounidenses experimentaban solo actividades educativas como visitas imprentas o mercados de productos agrícolas orgánicos.
En realidad, ese requisito garantizaba que los viajeros estadounidenses pasaban todo su tiempo en Cuba bajo la supervisión directa del gobierno, que exige a las agencias de viaje estadounidenses usar autobuses y guías del gobierno y alojarse mayormente en hoteles estatales.
Al acercarse el final de su segundo mandato, Obama eliminó ese requisito y abrió las puertas para que decenas de miles de personas viajasen a Cuba en forma independiente.
Los detractores de esa política dicen que despejó el camino para que mucha gente haga turismo a pesar de que está prohibido, disfrutando de la playa y de hoteles con todo pago.
Pero estas visitas independientes también contribuyeron a dar impulso al creciente sector privado. Decenas de miles de estadounidenses viajan a La Habana en vuelos directos de aerolíneas estadounidenses, se alojan en viviendas privadas a través de Airbnb y gastan miles de dólares en guías, taxis y restaurantes privados.
Un ex ingeniero industrial, Adyarin Ruiz, de 31 años, tiene una hostería de cuatro habitaciones en una sección restaurada de la Vieja Habana a la que llegan cada vez más estadounidenses dispuestos a pagar 100 dólares la noche en un país donde el salario promedio del estado es de 25 dólares al mes.
“En los últimos dos años, después de que se reanudaron las relaciones, he visto un crecimiento del turismo americano (estadounidense). Y eso se ve aún más desde que incrementaron los vuelos”, expresó Ruiz. “Los que han venido aquí (a la casa) son V.I.P. Se ve que tienen dinero y son clientes que les gusta la calidad y la exigen, y esta casa es muy bonita”.
En Estados Unidos también hay muchos empleos que dependen de los viajes a Cuba. La agrupación Engage Cuba, que favorece el deshielo, difundió un informe el jueves en el que dice que una anulación de todas las políticas de Obama hacia Cuba le costaría a las aerolíneas y los cruceros 3.500 millones de dólares en los próximos cuatro años y harían desaparecer 10.154 plazas de trabajo.
Funcionarios del gobierno estadounidense que también pidieron no ser identificados al hablar de la actual política dijeron que consideraciones políticas internas son la principal fuerza que impulsa cualquier desmantelamiento de las políticas de Obama hacia Cuba.
Durante la transición, Trump y el secretario de estado Rex Tillerson expresaron en privado su apoyo a la política de Obama hacia Cuba, según dijeron funcionarios actuales y pasados a la AP. Entre quienes todavía quieren desarticular esas políticas figuran el senador Marco Rubio y el representante Mario Díaz-Balart, ambos de ascendencia cubana. El gobierno de Trump desea mantener buenas relaciones con Rubio, quien integra la comisión del Senado que investiga las relaciones de Trump con Rusia, y con Díaz-Balart, miembro de la poderosa Comisión de Asignaciones Presupuestarias de la cámara baja.
Algunos asesores de Trump consideran asimismo que su reelección en el 2020 podría depender de la lealtad de los cubanos de la Florida, cuyo apoyo es considerado vital para ganar un estado clave.
Muchos objetan el que el gobierno cubano se beneficie de las relaciones con Estados Unidos, molestos con el hecho de que miles de viajeros estadounidenses se alojen en hoteles administrados por GAESA, un conglomerado cada vez más importante con fuertes lazos con los militares cubanos. A los cubano-estadounidenses les irrita en particular el que Obama haya permitido a empresas estadounidenses lidiar directamente con firmas vinculadas con los militares, en particular un acuerdo para que Starwood, compañía de Stamford, Connecticut, administre al menos dos hoteles de La Habana. Fuerzas anticastristas también piden medidas en el terreno de los derechos humanos. El año pasado hubo 9940 arrestos y detenciones breves comparado con las 8899 del 2014.
Las autoridades cubanas afirman que esos arrestos son provocados deliberadamente por disidentes financiados por grupos anticastristas, que buscan aumentar las cifras de detenciones.
Algunos funcionarios dicen que hay otra razón para ajustar la política de Estados Unidos hacia Cuba: presionar a Venezuela. El gobierno de Trump está buscando formas de obligar a Venezuela a resolver las protestas y la violencia casi diaria que buscan debilitar al presidente Nicolás Maduro. Cuba es un estrecho aliado de Maduro y cualquier medida contra los militares cubanos podría ser vista como un indicio de que Estados Unidos está haciendo algo.
Cuba, mientras tanto, se prepara para su propia transición. Castro ha dicho que dejará la presidencia en febrero del 2018 y se espera que entregue el gobierno a un vicepresidente de 57 años que no ha dicho mucho sobre su visión para el futuro del país.
La oficina de Rubio dice que el objetivo del senador es preparar el terreno para una nueva generación de líderes cubanos que le den mayor participación a la ciudadanía.
“Confío en que el presidente va a cumplir su compromiso de hacer cambios que promueven las aspiraciones del pueblo cubano de libertad económica y política”, dijo Rubio en un comunicado difundido el jueves por su oficina.
Latinoamericanas
Puerto Rico aprueba ley que reconoce al no nacido como persona natural, pese a rechazo de médicos
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1 semana agoon
diciembre 21, 2025Agencia EFE
SAN JUAN-La gobernadora de Puerto Rico, Jenniffer González, anunció este domingo que convirtió en ley un controvertido proyecto que reconoce al no nacido como persona natural y que ha despertado el rechazo de múltiples sectores, incluidos profesionales de la salud.
La medida es de la autoría del presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz, y de varios senadores conservadores, en su mayoría del Partido Nuevo Progresista (PNP), liderado por la gobernadora.
En una carta, los firmantes advierten que el proyecto, que propone reconocer capacidad jurídica al embrión desde la concepción, representa una alteración sustancial al marco legal del Código Civil vigente y podría tener consecuencias graves y directas sobre la práctica médica y la autonomía de las mujeres y personas gestantes.
La misiva fue firmada por el Colegio de Médicos y Cirujanos de Puerto Rico, ginecólogos obstetras, pediatras, neonatólogos, personal de enfermería y profesores de las Escuelas de Medicina.
La ginecóloga agregó que permitir la intervención legal de terceros -incluyendo exparejas o personas no vinculadas clínicamente- podría «retrasar decisiones médicas urgentes y poner en riesgo la vida de la persona gestante».
Los firmantes de la carta advirtieron sobre las complicaciones en casos en los que una persona gestante enfrenta un diagnóstico de cáncer durante etapas tempranas del embarazo, pues la medida podría limitar el derecho a interrumpir la gestación para permitir tratamientos que salvan la vida.
Alertaron a su vez sobre el riesgo de criminalizar pérdidas de embarazo por razones médicas y denunciaron que la medida podría otorgar nuevas herramientas legales a agresores en casos de violencia doméstica, extendiendo su control sobre la persona gestante.
Por su parte, el ginecólogo obstetra Alberto de la Vega indicó que el proyecto podría generar disputas judiciales prolongadas incluso en casos de violación, donde el agresor podría intentar representar legalmente al feto en contra de la voluntad de la víctima
Latinoamericanas
COLOMBIA: Armada incauta 27 toneladas cocaína en el Caribe
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1 semana agoon
diciembre 21, 2025
13/11/2023 Cocaína incautada en un semisumergible en Colombia
SOCIEDAD SUDAMÉRICA COLOMBIA
ARMADA DE COLOMBIA
BOGOTA .- El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha informado este domingo de que la Armada colombiana se ha incautado de 27 toneladas de cocaína en operaciones desarrolladas en los dos últimos días.
«En dos días, la Inteligencia de la Armada Nacional logró incautar 27 toneladas de cocaína», ha relatado Petro en un mensaje publicado en su cuenta en la red social X.
En uno de los operativos han sido recuperadas nueve toneladas de cocaína en varias embarcaciones «en dos rutas, una por el pacífico, con participación de Panamá, Australia, Costa Rica y el Salvador». «Y en otra operación cerca de las islas Canarias, con ayuda de la policías de Europa se incautó 18 toneladas», ha indicado.
Para Petro, supone «una de las mayores incautaciones de la historia en solo dos días, sin un solo muerto», mientras que «hay aproximadamente 20 capturados», un mensaje dirigido a Estados Unidos al que Petro reprocha las muertes de civiles, más de un centenar en las últimas semanas, en ataques militares estadounidenses contra presuntas lanchas del narcotráfico en el Caribe y el Pacífico.
La producción de cocaína en Colombia se disparó un 53 por ciento en 2023 hasta alcanzar las 2.644 toneladas, según la última estadística publicada por la oficina de la ONU contra la Droga y el Delito. El cultivo habría aumentado un 10 por ciento, hasta alcanzar más de 252.928 hectáreas, entre 2022 y 2023.
La mayor parte de la cocaína colombiana acaba en Estados Unidos y Europa a pesar de los esfuerzos de las autoridades colombianas. El ministro de Defensa de Colombia, Pedro Sánchez, informó recientemente de que entre el 1 de enero y principios de septiembre de 2025 las incautaciones de cocaína aumentaron un 8 por ciento en comparación con el mismo periodo del año anterior y el número de laboratorios de drogas destruidos, un 21 por ciento. Además, fueron capturados o «abatidos» 3.200 miembros de grupos criminales, lo que supone un aumento del 17 por ciento.
of-am
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Llegan 230 polícias kenianos para la lucha contra los pandilleros
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3 semanas agoon
diciembre 9, 2025Agencia EFE
Puerto Príncipe, Haití.-Un nuevo contingente de 230 policías kenianos «altamente especializados» llegó este lunes al Aeropuerto Internacional Toussaint Louverture, en Puerto Príncipe, con el fin de reforzar la Fuerza de Represión de Pandillas (GSF) en Haití, que lucha contra la inseguridad en este país devastado por la violencia armada.
Este quinto contingente fue recibido por miembros del Gobierno haitiano, por el director general de la Policía Nacional de Haití (PNH) y por miembros del cuerpo diplomático.
«Llegan en un momento crucial, tras la ampliación del mandato de la GSF publicada el 3 de octubre de 2025. Su misión es clara: reforzar, consolidar y dinamizar los progresos ya realizados por la GSF», declaró el comandante en jefe de la Fuerza, Godfrey Otunge, en su discurso.
Para él, la llegada de este nuevo contingente keniano envía un mensaje fuerte e inequívoco: Kenia está al lado de Haití, todo el tiempo que sea necesario, hasta que prevalezca la paz.
El 26 de junio de 2025, el primer contingente keniano, compuesto por 200 policías, aterrizó en este aeropuerto y recibió una cálida y memorable bienvenida, recuerda Otunge. El Gobierno haitiano, el director general de la PNH, los embajadores y un público haitiano entusiasta les recibieron con los brazos abiertos, mientras los periodistas captaban ese momento histórico, afirmó.
Desde ese primer aterrizaje de Kenya Airways en julio de este año, le han seguido otros tres contingentes. Hoy en día, Kenia se ha convertido en el país que ha desplegado más de 700 policías especializados, lo que ha garantizado una transición fluida de la antigua Misión de Apoyo a la Seguridad (MSS) a la nueva GSF, continuó el responsable.
«Estos agentes han trabajado sin descanso, codo con codo con la PNH, llevando a cabo operaciones específicas y basadas en la inteligencia, especialmente en los departamentos de Oeste y Artibonite», afirmó Otunge.
Con la llegada de este nuevo contingente, unos 100 agentes kenianos que formaban parte del primer despliegue en julio de 2025 se marchan.
«Cuando pasamos del MSS al GSF, algunos escépticos, incluidas las propias bandas, esperaban caos y un vacío de seguridad. Por el contrario, el GSF ha demostrado ser más centrado, mejor coordinado y mejor equipado, basándose en las duras lecciones aprendidas durante la misión MSS», agregó el militar.
compromiso constante
El comandante también elogió el «compromiso constante» de otras naciones presentes sobre el terreno: Bahamas, Jamaica, El Salvador y Guatemala, que han demostrado su voluntad de reforzar aún más la GSF con nuevas capacidades.
Otunge expresó su «profunda» gratitud al Gobierno haitiano y a la PNH. Destaca que su apoyo, coordinación y voluntad política han sido indispensables.
«Nuestros esfuerzos conjuntos, liderados desde la Oficina del Primer Ministro, la PNH y el mando de la GSF, han permitido operaciones bien sincronizadas que han asestado golpes significativos a las bandas que atormentan a esta nación. Esta unidad de acción ha sido esencial para movilizar todos los recursos disponibles hacia un único objetivo: restablecer la seguridad y la dignidad del pueblo haitiano», insistió.
Sin embargo, estos avances no se han logrado sin sacrificios, remachó el militar keniano.
«Hemos perdido a oficiales de la PNH y de la GSF en el cumplimiento de su deber. Que sus almas descansen en paz. Su valentía nos recuerda que el precio de la paz es a menudo elevado, pero es un precio que estamos dispuestos a pagar para que Haití recupere su legítimo lugar como nación fuerte, segura y próspera», expuso.
