Desde horas de la madrugada, infantes de Marina y policías brasileños iniciaron la toma de dos de las más grandes favelas de Río de Janeiro, al sureste de Brasil. El objetivo del procedimiento es que con la participación de mil 500 efectivos se contrarresten delitos como el narcotráfico

Más de mil 500 efectivos entraron a las favelas más peligrosas de Río. (Foto: Efe)
Al menos mil 500 efectivos de la Marina y de la Policía Militar de Río de Janeiro (sureste de Brasil) iniciaron este domingo la toma de las favelas Manguinhos y Jacarezinho, comunidades que desde hace años están invadidas por bandas delictivas y en las que se quiere implantar un proceso de pacificación.
Desde horas de la madrugada, los medios locales reportaron la participación de al menos mil 500 efectivos uniformados, quienes además contaron con el apoyo de 24 vehículos blindados y helicópteros.
Según medios locales, en los primeros minutos de la operación se incautaron 10 kilos de pasta base de cocaína y 30 autos robados, también fueron detenidas 104 personas.
Ante la situación, el gobernador de Río de Janeiro, Sergio Cabral, destacó que tras la ocupación militar de esas favelas, comenzará un proceso de pacificación, que incluye obras de infraestructuras y servicios sociales.
Se trata de otro paso más para reducir la violencia y ofrecer una vida más pacífica a los ciudadanos, expresó Cabral.
La autoridad también sostuvo que esto es un proceso definitivo y agregó que la estrategia de seguridad está dirigida a garantizar la paz en todas las comunidades.
La operación se realizó sin disparos y según la Policía, se debe a un trabajo meticuloso de inteligencia, de localización de escondites de drogas, armas, y detención de delincuentes, añadió.
Estas favelas carecen de infraestructuras públicas pese a estar enmarcadas por la Avenida Brasil, la Línea Amarilla y la Avenida Suburbana, tres de las principales vías de Río de Janeiro y que conducen a locales estratégicos como el centro y el aeropuerto internacional.
En este contexto, Eduardo Paes, reelecto alcalde esta ciudad, con el mismo nombre del Estado, reconoció que hay personas que viven en esas comunidades en condiciones infrahumanas, por lo que les garantizó su ayuda para salir de esa situación.
La operación de toma de favelas se enmarca en la iniciativa gubernamental puesta en marcha desde el 2008 (durante la administración de Luiz Inácio Lula Da Silva) y que hasta la fecha ha logrado la instalación de una treintena de Unidades de Policías Pacificadoras (UPP) en favelas de Rio de Janeiro.
Para el año 2014, el Gobierno espera alcanzar las 40 favelas tomadas, a fin de seguir impulsando la guerra contra el narcotráfico y contra las bandas delictivas.