En crisis postprimarias Leonel juega ruleta rusa y monta candidatura fuera del PLD.

Las acciones del expresidente Leonel Fernández indican que se  ha decidido jugar una ruleta rusa en su lucha por hacer valer unos alegatos de fraudes que pierden credibilidad y fuerza en el curso de los días, pero que constituyen también una forma de lesionar la confiabilidad que debe proporcionar la Junta Central Electoral (JCE) para las elecciones más importantes para escoger las autoridades nacionales el año entrante 2020.

En la medida en que pasan las horas el candidato hasta ahora perdedor abandona y recurre a una serie de recursos, unos en el campo legal y otros en el ámbito político para preparar el terreno para lanzarse a una candidatura presidencial fuera del PLD en el 2020.

El pedido que había mantenido el hasta ahora  presidente del PLD consistía en que se contaran los votos físicos emitidos a nivel presidencial en las primarias, pero cuando la JCE decide hacerlo, entonces Leonel sostiene que eso no es una garantía para esclarecer el fraude que se alega porque en su opinión se rompió  la cadena de custodia de los equipos utilizados.

Entonces,  Leonel ahora hace el pedido de que la Junta Central Electoral haga una auditoria forense al módulo fuente que sirvió de base para el conteo y  la transmisión de los votos de forma automatizada para cuya medida el expresidente plantea que esto se haga con la presencia de observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA), otros organismos internacionales y la embajada de los Estados Unidos en el país.

Al propio tiempo, Leonel ha sometido al Tribunal Superior Electoral  un referimiento para impedir que la JCE continúe el conteo de los votos y que proclame a Gonzalo Castillo como aspirante ganador  y de inmediato ha sido enrolado para ser conocido hoy, el cual podría no tener buenos resultados, porque si bien este tipo de recurso no requiere o no debe ir al fondo del caso, pero por lo menos debe sustentarlo con algunas pruebas para que pueda tener un resultado positivo.

Sin embargo, el hecho de que Leonel y su gente han sido, podría decirse, muy inconsistentes en su denuncia, porque en un momento han sostenido algo, pero luego se retractan y lesionan su propia credibilidad, como por ejemplo la acusación de Rubén Maldonado, vocero de esa corriente en la JCE, en contra de este órgano y además de Jochi Gómez, hijo del periodista Guillermo Gómez, de que habían participado en el fraude cometido, pero luego ante un emplazamiento del abogado de éste, se retracta durante su participación en el programa El Sol de la Mañana, lo cual ha dejado muy mal parado a ese grupo.

Pero hay que tomar en cuenta que Leonel al propio tiempo que recurre a recursos legales también lo hace en el ámbito político con el anuncio de otra manifestación frente a la Junta Central Electoral para aparentemente presionar en favor de su causa, pero que en el fondo es para preparar y montar una maquinaria propagandística frente a la posibilidad  su candidatura presidencial por un grupo de pequeños partidos, encabezado por uno de sus aliados, la Fuerza Nacional  Progresista.

Empero, para Leonel presentar   su aspiración presidencial al margen del PLD tendría que atacar el articulo 49 de la Ley Electoral, la 3318,  que impide que un aspirante que haya participado en cualquier partido político no puede hacerlo a través de otro.

En este caso Leonel tendría que recurrir al Tribunal Constitucional, porque ciertamente ese artículo de la Ley Electoral se contrapone con la Constitución de la República en lo que respecta al derecho fundamental de elegir y ser elegible.

Otro obstáculo político sería que habría que ver hasta donde es posible que todos los aspirantes en la corriente de Leonel dentro del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) se sumen a esos planes, sobre todo después de haber ganado las primarias, como por ejemplo Abel Martínez y José Rafael Vargas, entre otros.

Esto último va estar determinado en una proporción importante por  el éxito de Leonel en el terreno jurídico y podría que no necesariamente en el  político-electoral, principalmente con el referimiento a conocerse en el Tribunal Superior Electoral, cuya sentencia o ordenanza si resulta contraria a su pedido puede liquidar definitivamente la imagen del presidente del PLD, pero si es positiva para él  podría fortalecerla.

Ya el Tribunal Constitucional ha anulado una serie de artículos de la ley señalada más arriba porque chocaban con la carta magna, pero habría que ver cual sería la actitud de los jueces de esta alta corte frente a ese recurso, porque hay quienes sostienen que los jueces que lo conforman responden a la corriente danilista, cuyo presidente Milton Ray Guevara era o es un seguidor de un partido que se ha convertido en visagra del PLD como lo es el Revolucionario Dominicano PRD.

Sin embargo, se debe decir que de todos los tribunales de las altas cortes, el Constitucional  ha tenido una actitud  de revisión de una serie de leyes y sentencias que violentan el estado de derecho es el que más ha trabajado en favor de la institucionalidad, lo cual implica factores en contra y en favor de Leonel.

Todos estos pasos dados por el exmandatario ponen en tela de juicio la credibilidad de la Junta Central Electoral y el uso de una tecnología que enamoró a los amplios sectores de la vida nacional, pero que se cuestiona su vulnerabilidad.

Sin lugar a dudas que estos escarceos leonelistas ponen en peligro las elecciones generales a celebrarse en el año 2020, lo cual también representa una amenaza  para el sistema democrático.

Lo cierto es que frente a la situación Leonel parece que ha sido incitado a que abandone el PLD y que presente una candidatura presidencial por un grupo de pequeños partidos que responden a sus intereses, pero habría que ver si tendría éxito en sus propósitos o si en realidad termina liquidado porque le toque el tiro al azar que se dispara en ese juego conocido como ruleta rusa y que este muera políticamente en el escenario nacional.

En todo caso una candidatura de Leonel a la presidencia de la República por otros partidos que no sea el PLD, el expresidente podría jugar un papel podría decirse aceptable, aunque no gane, pero su manejo en la actualidad pesará mucho porque se observa que su liquidación no solo podría ser electoral, sino ético y moral, porque su gente lanza una serie de acusaciones que carecen de prueba y con Maldonado haberse retractado de lo que dijo en contra de Jochi Gómez sirve para medir también que una cosa igual pudo ocurrir o ocurre con las primarias, porque este mismo personaje es el vocero en el órgano electoral del grupo de Leonel Fernández, lo cual afecta toda la estrategia del exjefe de Estado.