“Si ven este vídeo estaré muerta o en una muy mala situación”, afirmó la joven en un video publicado en YouTube
DUBÁI. Latifa bint Mohamed al Maktum, hija del monarca de Dubái Mohamed bin Rashid al Maktum ha desaparecido de una forma muy extraña.
La joven había señalado públicamente sus deseos de huir porque era víctima de maltrato y porque no soportaba las restricciones impuestas por su familia.
En un vídeo difundido en YouTube en marzo, sheikha Latifa, hija del emir de Dubái Mohamed bin Rashid al Maktum, dijo que huía del emirato y acusaba a su padre de maltratarla.
En el vídeo, Latifa cuenta que su hermana Shamsa huyó en 2000 al Reino Unido, pero fue detenida y repatriada, y ella misma trató de huir por primera vez en 2002 a Omán, pero fue detenida en la frontera y después, “torturada”.
Latifa explicó que hizo el vídeo porque, en el caso de que fracasaran sus planes de fuga, podría salvar su vida, ya que sabe que a su padre “solo le preocupa su reputación, su ego”.
“Si ven este vídeo estaré muerta o en una muy mala situación”, afirma la joven, en su declaración en inglés.
Según una nota publicada en el periódico “El Nuevo Día”, Human Rights Watch (HRW) pidió el sábado pasado a las autoridades de Dubái que expliquen “inmediatamente” dónde se encuentra una de las hijas del emir, la princesa Latifa, porque en caso contrario podría considerarse “una desaparición forzosa”.
La infancia de la princesa de Dubái estuvo bajo el cuidado de la hermana de su padre. Es hija del hombre más poderoso de Dubái y primer ministro de Emiratos Árabes Unidos, Mohamed bin Rashid al Maktum.
Según ha manifestado la joven a sus amigos más cercanos y en un video, no simpatiza con las ideas de su padre.
Desde el 8 de marzo de este año se desconoce el paradero de la princesa. Testigos anónimos indicaron que la joven fue detenida por fuerzas emiratíes cerca de la costa de Goa, en la India, cuando trataba de huir en barco hacia ese país.
Su desaparición ha planteado graves preocupaciones sobre su seguridad y bienestar lo que, según HRW, podría ser un caso de desaparición forzosa.
El grupo privado con sede en Reino Unido “Detained in Dubai”, que afirma ayudar a personas víctimas de injusticias en Emiratos Árabes Unidos, hizo eco del caso de esta princesa de 32 años.
“Detained in Dubai” lanzó una campaña afirmando que en marzo un barco fue apresado por la fuerza en aguas indias.
El grupo asegura que la princesa y varios extranjeros -entre ellos su amiga finlandesa Tiina Jauhiainen y el franco-estadounidense Hervé Jaubert- se hallaban a bordo de la embarcación. En el pasado Jaubert tuvo problemas con la justicia emiratí por “fraude comercial”.
El 17 de abril, el gobierno de Dubái rompió el silencio sobre este caso rocambolesco, en el que también estaría involucrado otro francés, Christian Elombo, acusado de haber ayudado a la princesa y actualmente detenido en Luxemburgo.
Sin entrar en detalles, una fuente próxima al gobierno de Dubái afirmó que la princesa Latifa había sido “traída de vuelta” y que se encontraba “bien”. Lo definió como “un asunto privado” que fue “explotado” por una “banda de estafadores”.
Pese al comunicado, la princesa aún no se ha pronunciado ni ha dado signos de encontrarse bien.
Las autoridades de Dubái “deben permitir a la princesa establecer contacto con el mundo exterior” y aclarar su “estatus jurídico”, declaró Sarah Leah Whitson,directora de HRW para Oriente Medio.
“Si ella está detenida debe tener los derechos de los que gozan todos los detenidos, incluido el de comparecer ante un juez independiente”, añadió en un comunicado, difundido también en las redes sociales.
Datos tomados del periódico “El Nuevo Día”