Por Narciso Isa Conde
El diario Hoy de hoy en una nota titulada “DIPUTADO FRANCÉS RELATA CÓMO SE ORGANIZÓ LA FUGA DE DOS PILOTOS”, en forma muy discreta, nada espectacular, informa lo siguiente:
“El legislador, que dirigía “el equipo 1” del operativo, afirmó que él ( Aymeric Chauprade) y Chistophe Naudín, el segundo al mando, se conocen desde muchos años y que en el 2010 lo invitó a a venir al país cuando era asesor del expresidente Leonel Fernández” (Leonora Ramírez, pag 4-A, sección El PAIS, diario Hoy-30-19-2015)
Cualquier medio de comunicación sensacionalista le hubiera dado primera página al contenido de ese interesante párrafo.
Cualquier medio acucioso hubiera indagado como fue eso de la asesoría de Naudín a Leonel, con qué fines, en cuál especialidad, en qué periodo, con que sueldo…
¡Qué casualidad! Otra vez Leonel.
¡Qué interesante y curioso! Otra vez Leonel.
El mismito de las relaciones con el narco-capo Quirino Ernesto Paulino.
El de las fotos con Nelson Solano, el “zar de la heroína” en El Caribe, extraditado a EEUU.
El del encuentro en Palacio con Arturo del Tiempo Márquez y su hijo.
El padrino de Félix Bautista, enllave del narco Figueroa Agosto.
El protector de Víctor Crispín y del general García Aquino, que incorporaron a Figueroa Agosta a la DNI.
El jefe político de prominentes narco-generales tipo Florentino Florentino, Guzmán Fermín, Rosado Mateo, Ventura Bayonet…
El que blindó el sistema judicial y pactó la impunidad (la cuota propia y la de los suyos) a cambio de la re-postulación de Danilo.
La inteligencia francesa se puso traje de diputado de la extrema derecha y de asesor del presidente Fernández, familiarizándose con los servicios secretos locales: DNI, G2, M2, J2, DITRIN…
Da risa ver al Procurador hablando de darle curso al proceso contra los narco-pilotos franceses para instrumentar la persecución internacional. Suena ridículo oírlo decir lo seguro que está la “cooperación de Francia” en esa tarea, luego de que la autoridades de ese país han dejado claro que “no habrá extradición” de sus connacionales.
Todo esto luce ser puro teatro magisterial.
Llama la atención, además, el silencio del magistrado Domínguez Brito y del Gobierno frente al vínculo Naudín-Leonel y sus consecuencias.
Ahora, después de denunciado, también se empeñan en sepultar mediáticamente el hecho de que el avión en que se pretendió trasladar de aquí a Francia 700 kilos de cocaína, pertenece a un gran empresario francés amigo del expresidente Sarkozy y fue usado por él. Y que ese cártel francés ha sido protegido por fuertes enclaves militares, empresariales, parlamentarios ubicados al interior del Estado francés.
Como pasa aquí con los de aquí.
En consecuencia no hay azar.
Nada de esto es casual.
Hay hermandades entre narco-poderes capitalistas. Hay blindajes aquí y a allá, y asociación para delinquir.
La persecución internacional con ficha roja es pura baba.
La desvinculación del Estado francés de la operación de traslado es una mentira tan grande como la disposición del Estado dominicano a sancionarla.
La identidad del cartel como parte del narco-poder francés, sus vínculos de Estado aquí y la capacidad de chantaje de los narco-pilotos, torcieron el curso de la condena, posibilitando la tragicomedia de esta “fuga” a la francesa; mientras el contubernio ha sido convertido mediáticamente en espectáculo salpicado de héroes de papel sanitario.