Tras el paso el jueves pasado del huracán María cerca de la costa este y noreste de la República Dominicana, el país ha recibido fuertes lluvias, que se han prolongando y fortalecido desde el fin de semana por una vaguada y una onda tropical, por lo que 20 de las 32 provincias de la nación siguen en alerta.
Una de la provincia que continúa seriamente afectada es Montecristi, principalmente las localidades de Palo Verde y Castañuela, donde los residentes están “con el agua a la cintura” a causa de la crecida del Yaque del Norte, explicó a Efe por teléfono el representante de la Defensa Civil en el noroeste, Pedro Torres.
“Miles de casas están inundadas. Ha sido mucha agua”, dijo Torre, mientras participaba en Palo Verde en el rescate, junto a miembros de las Fuerzas Armadas, de tres monjas atrapadas en un edificio debido a la situación, que calificó de “muy difícil” tanto para Palo Verde como para Castañuela.
Estos dos localidades fueron visitadas el domingo por el presidente dominicano, Danilo Medina, como parte de un recorrido por el noreste y noroeste del país para constatar los daños, y este lunes dispuso una serie de obras para Montecristi, durante una reunión con autoridades locales y dirigentes comunitarios.
También sufrieron importantes daños las provincias Duarte, Samaná, Espaillat y María Trinidad Sánchez, en el noreste; Dajabón (norte); y El Seibo, Hato Mayor y La Altagracia, en el este, según informaron diputados en la sesión de hoy de la cámara baja, donde reclamaron ayuda para sus distintas comunidades.
En ese sentido, el presidente de dicha cámara, Rubén Maldonado, aseguró de que ese órgano irá “en los próximos días” con “la mano amiga” a las comunidades afectadas para ayudar a la gente.
El huracán María causó un muerto en el norte a causa del derrumbe del techo de una vivienda y otro en el este tras intentar cruzar una cañada desbordada, según fuentes de la de Defensa Civil, pero el COE no incluye en sus estadísticas ambas muertes, por considerar que se trata de episodios indirectos.
Las fuertes lluvias ocasionaron daños a 14 puentes y a 5 carreteras, y aunque el Gobierno aún no han hecho un balance total de los daños, varios funcionarios aseguran que serán “cuantiosos”.
Un informe dado a conocer hoy por el Centro de Operaciones de Emergencias (COE) indicó que las precipitaciones y las consecuentes inundaciones destruyeron 188 viviendas, afectaron 861, mientras que 8.856 están anegadas, una buena parte de ellas en el noreste y noroeste a causa del desbordamiento de los ríos Yuna y Yaque del Norte, dos de los principales del país.
Esto ha ocasionado que 24.384 personas se hayan trasladado a casas de familiares y que 1.819 estén el albergue oficiales, de acuerdo con el COE, que informó de que 26 comunidades están incomunicadas y que 27 acueductos se encuentran fuera de servicio, lo que mantiene sin agua a 389.352 personas.
El director de los Comedores Económicos del Estado, Nicolás Calderón, informó hoy de que el presidente Danilo Medina convocó a una licitación pública para abastecer los almacenes de alimentos para poder asistir a los afectados por las lluvias.
El Ministerio de Obras Públicas informó de que continúa interviniendo en zonas perjudicadas, principalmente en la limpieza de las vías, mientras que el Plan Social de la Presidencia aseguró que prosigue la entrega de electrodomésticos y otros artículos del hogar a personas afectadas.
Por su lado, el Ministerio de Salud está enviando plantas potabilizadoras y camiones de agua a la provincia de El Seibo y Espaillat, para apoyar la distribución de agua a la población.
La Oficina Nacional de Meteorología (Onamet) prevé una reducción “significativa” de las lluvias a partir de mañana, miércoles, en todo el país, aunque no descartó algunos chubascos aislados en fronteriza, sectores de la cordillera central y Los Haitises, en el noreste.EFE