Conecta con nosotros

Opinión

Michel Foucault, la reelección, el modelo

Published

on

POR ANDRÉS L. MATEO

El país está en ascuas. Es necesario pisar fino para no quemarse los pies con una brasa ardiendo. Pero en el mundo de hoy lo real no existe sino como una abstracción que organiza muchas cosas a su alrededor. Leer lo que está pasando ahora mismo es introducirse en ese complejo entramado de informaciones, hechos, réplicas y contrarréplicas, retículas de poderes, tácticas y estrategias, etc. Todo solapado en gran medida en el complejo semiótico de la lucha por el poder.

Esa, sin embargo, es la apariencia. Danilo Medina enfrentado a Leonel Fernández ya no encarna la misma confrontación que se verificó en el 2008. El danilismo está muy lejos de aquellas dos lágrimas cansadas corriendo por el rostro de un Danilo Medina abatido diciendo: “Me derrotó el Estado”. Ambas facciones ya han probado “las mieles del poder”, y pertenecen a la misma estirpe. Una buena parte, pues, de lo que está ocurriendo ante nuestros ojos no necesita ser justificada. Se trata de la continuidad del modelo  de dominación social implantado por el PLD en el país. Ese modelo tejió para el PLD una retícula de poder exitosa. Subordinó todo el tinglado institucional del país a los intereses del grupo dominante, legitimó la corrupción, enriqueció a la cúpula partidaria, originó acumulación originaria de capital que permitió crear grupos económicos pujantes, convirtió al Estado en fuente de financiamiento del partido, y se constituyó en garantía de los triunfos electorales.

No hay una tarea más agotadora que la de ser original alentando un proyecto reeleccionista, porque hemos tenido miles de farsantes  agazapados detrás de todas las máscaras. El continuismo es la película trágica de nuestra identidad. Cuanto podamos esgrimir contra los argumentos de los reeleccionistas ha sido extraído de la más cruel experiencia de la historia nacional. Lo nuevo ahora es que el degüello se da hacia dentro del partido gobernante. Y el objetivo primordial de Danilo Medina y su grupo económico es terminar de darle la estocada mortal al liderazgo zarandeado de Leonel Fernández.  Si Danilo Medina impone las primarias abiertas, con los fondos públicos le llenará las urnas a Leonel Fernández, porque pese al impedimento constitucional el grupo económico que lo sustenta lo inscribirá como precandidato en el partido. Leonel se juega su última carta, y no tiene ninguna otra alternativa que no sea pelear adentro.  Por lo que Leonel Fernández quiere volver al poder es exactamente lo mismo por lo que Danilo Medina y su grupo quieren quedarse. Gonzalo Castillo, José Ramón Peralta, José Manuel González Cuadra, José del Castillo Saviñón, Carlos Amarante Baret, y muchos otros; pueden proclamar que la reelección es una “jornada patriótica”. Pero eso no es más que lo que Michel Foucault llamó “discurso-poder”, un recurso de legitimación que emplean todos los grupos dominantes. El escarceo de las primarias abiertas o cerradas es apenas el efecto de lo que verdaderamente está en juego. La sociedad no es más que un sistema de fuerzas y poderes, y por debajo de esas retóricas se esconde la mano férrea de la dominación.

Si Leonel Fernández es desconsiderado y sucumbe sin dignidad ante la embestida del oficialismo, habrá sellado su destino. Para el leonelismo esta etapa es de vida o muerte. El danilismo no tiene ninguna sucesión que le garantice al grupo económico que lo sustenta seguir disfrutando del poder. Su urgencia por lo tanto es expulsar a Leonel Fernández del escenario, e imponer la reelección. Sin la reelección el danilismo queda desguarnecido, se expone a muchas consecuencias. Al danilismo se le abrió desmesuradamente el apetito. Han saqueado el erario sin piedad.  Reelegir a Danilo es la consolidación, la garantía de la impunidad; y el pago exhaustivo a sus militantes y rentistas que invirtieron en el proyecto. Y en esa línea, Leonel Fernández es un incordio a quien hay que barrer. Eso es, realmente, lo que está pasando.

Click to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Opinión

La Carta de las Naciones Unidas y los Juicios de Nuremberg y Tokio

Published

on

Por Rommel Santos Díaz

El 24 de octubre de 1945 entró en vigor la Carta de Naciones Unidas, con lo que se estableció un sistema de seguridad colectiva. El párrafo 4 del artículo 2 de la Carta de las Naciones Unidas prohíbe ´´recurrir a la amenaza o al uso de la fuerza contra la integridad territorial o la independencia política de cualquier Estado, o en cualquier otra forma incompatible con los propósitos de las Naciones unidas´´

.

La Carta de las Naciones Unidas permite el uso de la fuerza solamente con el propósito de legítima defensa individual o colectiva con la autorización del Consejo de Seguridad.

Sin embargo, la Carta de las Naciones Unidas insta al Consejo de Seguridad a responder a las amenazas a la paz, los quebrantamientos de la paz o actos de agresión. No obstante, no define al concepto de agresión ni la responsabilidad penal individual en los casos de agresión.

Las potencias vencedoras de la Segunda Guerra Mundial llevaron a cabo los juicios de Nuremberg (1945-1946) y Tokio (194666-1948) para enjuiciar a los responsables de crímenes contra la paz, crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad.

En el Estatuto de Nuremberg se definen los crímenes contra la paz como ´´planificar, preparar, iniciar o librar guerras de agresión, o una guerra que constituya una violación de tratados, cuerdos o garantías internacionales, o participar en planes comunes o en una conspiración algunos de los objetivos anteriormente indicados´´.

No obstante, el Estatuto de Nuremberg no especifica con mayor detalle lo que se entiende por ´´agresión´´. Tras los juicios de Nuremberg y Tokio, la Asamblea General de las Naciones Unidas confirmó los principios de la Carta de Nuremberg y de la sentencia del Tribunal de Nuremberg en la Resolución 95.

Después de décadas de negociaciones, en diciembre de 1974 la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó la Resolución 3314. El propósito de la definición de la agresión anexa a la Resolución era orientar al Consejo de Seguridad en su determinación  de la existencia de un acto de agresión.

Cabe destacar, que la definición concierne al acto de agresión de Estado, no el acto de un individuo  que pudiera conllevar la responsabilidad del Estado.

La definición del acto de agresión refleja básicamente la noción del uso legal de la fuerza contenida en el párrafo 4 del artículo 2 de la Carta de las Naciones Unidas y enumera ejemplos específicos de los actos de agresión, tales como la invasión o el ataque por las fuerzas armadas de un Estado al territorio de otro Estado incluida la ocupación militar relacionada con dicho ataque o invasión, el bombardeo de las fuerzas armadas del Estado contra el territorio de otro Estado.

Finalmente, las disposiciones fundamentales de la definición de crimen de agresión de 1974 (artículos 1 y 31) fueron incorporadas posteriormente a parte de la definición  del crimen de agresión en el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional.

rommelsantosdiaz@gmail.com

Continue Reading

Opinión

La República de los discursos y la del hambre

Published

on

Por Isaías Ramos

Juana se levanta cada día antes del amanecer en un barrio de La Vega.

Hervir agua y engañar al estómago de sus tres hijos se ha vuelto un ritual.

A veces el arroz no alcanza; otras veces, simplemente no hay nada.

José, en San Cristóbal, pasa el día entero en su motor buscando pasajeros, pero al final apenas le alcanza para el gas y un pan.

Doña Mercedes, jubilada de 68 años, cuenta los medicamentos que ya no puede comprar.

Esas tres vidas —y millones más— componen la estadística más cruel de la República Dominicana: “el 60 % de los dominicanos no tuvo dinero para comprar comida el último mes”, según la encuesta de CID Gallup.

Sesenta por ciento.

Esa cifra debería estremecer las conciencias, pero nuestra clase política parece incapaz de sentir.

Carece de simpatía moral, de empatía humana.

Mientras el pueblo sufre, ellos sonríen.

Mientras el hambre avanza, ellos viajan, posan y celebran.

Han convertido la política en un ejercicio de vanidad y mentira, donde el poder se usa para distraer, no para servir.

Esta semana, mientras el país real sobrevive a base de deudas y rezos, un grupo de funcionarios dominicanos celebraba en Madrid la llamada “Semana Dominicana en España”.

Entre luces, discursos y copas de vino, se habló de “una nación moderna, resiliente y llena de oportunidades”.

El ministro de Industria y Comercio describió al país como “una economía estable y competitiva”.

A miles de kilómetros, Juana seguía mirando su olla vacía.

Esa es la brecha que nos divide: “la República de los discursos y la República del hambre”.

Esta misma semana, el Banco de Reservas anunció que su feria automotriz rompió récords con “más de 8,600 millones de pesos en financiamientos”.

Un logro, dicen.

Pero, ¿de qué sirve ese “crecimiento” en un país donde la mayoría no puede costear la comida?

Nos quieren convencer de que el progreso se mide en autos nuevos, cuando la realidad es que el pueblo se endeuda para sobrevivir.

Y como si el cinismo no tuviera límites, Leonel Fernández, el mismo que en 1996 inició el abandono del campo con su modelo neoliberal, ahora pretende posar de defensor de los productores agrícolas.

Durante su gobierno se desmanteló la soberanía alimentaria, se marginó al campo y se sustituyó la producción nacional por dependencia externa.

Hoy, con su neolenguaje habitual, vuelve a vender ilusiones, como si el pueblo hubiese olvidado quién abrió la puerta a esta crisis.

Mientras ellos gastan millones en propaganda, viajes y banquetes, el pueblo hace milagros para sobrevivir.

Los recursos que malgastan en vanidad deberían servir para matar el hambre del pueblo, pero no lo harán.

Porque no están dispuestos a sacrificar la avaricia ni el lujo en que viven.

Han demostrado que no gobiernan por amor al país, sino por adicción al poder.

Desde el Frente Cívico y Social (FCS) advertimos al pueblo:

no sigamos siendo indiferentes ante esta ruta que nos conduce al precipicio.

Negar al pueblo su derecho a una vida digna es un acto de opresión y perversidad.

Empujarlo al hambre, a la enfermedad y a la muerte es un asesinato efectivo del alma nacional.

Promocionar sectores como zonas francas y turismo —que poco aportan al fisco y explotan la mano de obra sin garantizar ni siquiera el valor de la canasta básica— no es propio de un Estado social de derecho: es propio de un Estado de opresión.

Si hoy callamos, mañana viviremos de rodillas ante los mismos que nos han traicionado una y otra vez.

Pero si despertamos, si el pueblo recobra la memoria y la dignidad, podremos reconstruir una patria donde nadie tenga que hervir agua para engañar al hambre.

En el FCS trabajamos cada día concientizando y organizando los núcleos cívicos en todo el territorio nacional.

Sabemos que solo el empoderamiento del pueblo hará posible cumplir nuestra Constitución y recuperar el verdadero Estado Social y Democrático de Derecho.

Recuperar nuestros campos y apoyar la producción local no es una simple idea: es un deber nacional y una obligación moral del Estado.

Sesenta por ciento.

Esa es la cifra de la vergüenza.

Pero también puede ser el punto de partida de nuestra redención.

Porque el hambre no se tapa con discursos: se combate con justicia.

Y la patria no se vende, se defiende con pan, con verdad y con dignidad.

¡Despierta, RD!

Continue Reading

Opinión

Libros de periodista dominicano son acogidos en universidades de EE.UU., Europa y Asia

Published

on

Por Oscar López Reyes

NUEVA YORK.- Libros sobre comunicación, Barahona, biografía, literatura, superación y trágicos, publicados por el periodista y escritor dominicano Oscar López Reyes, han sido colocados en anaqueles y catalogados en bibliotecas de las principales universidades de Estados Unidos, así como de Canadá, Alemania, Londres y Taiwán, que los han adquirido por cuenta propia para ponerlos a disposición de sus estudiantes, profesores e investigadores.

Además de los formatos físicos, obras del actual director de la Escuela de Comunicación Social de la Universidad Dominicana OyM están siendo incluidas en WorldCat, el catálogo bibliográfico en línea de acceso público más grande a nivel global, que representa un reconocimiento significativo y aumenta la visibilidad y accesibilidad de sus producciones para investigadores, académicos y bibliotecas del universo.

Libros del profesor López Reyes, que suman 23, han sido colocados en bibliotecas de las universidades norteamericanas Harvard, Yale, Columbia, Princeton, City College de la Ciudad de Nueva York (Cuny), Cambridge, Michigan State, Illinois, Carolina, Brighman Young Provo, Arizona, California, Florida, Chicago, Massachusetts Amherst, Texas, Connectitucut, Motre Dame du Lac, Georgia, Georgetown, Pittsburgh, Cornell, Duke, Wisconsin, Madison, Kansas, Tulane y Puerto Rico.

También, por el Grupo de la Universidad de Toronto (Canadá), la Universidad de Londres, el Instituto Ibero-Americano de Patrimonio Cultural Prusiana de Berlín (Alemania) y la Universidad Wenzao Ursuline de Idiomas (Taiwán), así como por la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos, la más grande del mundo con sede en Washington, y Biblioteca Pública de Nueva York, situada en la Quinta avenida con calle 42, otra de la más nutrida del planeta.

Las obras físicas del expresidente del Colegio Dominicano de Periodistas (CDP) y la Asociación Dominicana de Escuelas de Comunicación Social (AdecomRD) fueron adquiridas por las bibliotecas universitarias en Ferias de Libros y en librerías de República Dominicana, y el levantamiento bibliográfico citado fue hecho por el Instituto de Estudios Dominicanos de la Universidad de la Ciudad de Nueva York (Cuny).

Las obras colocadas en las bibliotecas de los centros de estudios universitarios citados son Poblada y Matanza (1984): tres días de protestas y otros relatos; Crímenes contra la prensa: atentados y censuras en República Dominicana 1844-2007; Casandra Damirón: vida y canto, y No estaba en el avión: crónica sobre la caída del vuelo 587.

Igualmente, Biobibliografía de la Comunicación: Inventarios de Investigaciones Dominicanas 1888-2006; El Otro Periodismo, el de Provincias; Historia del Desarrollo de Barahona; Narración e Interpretación; Historia de los Medios de Comunicación Social de Barahona y Tesoros de Barahona: Educación, Religión y Deporte, que representan un compromiso con la promoción del conocimiento y la cultura dominicana.

Los otros libros publicados por López Reyes son El Miedo Escénico: ¿Qué es y cómo superarlo?, Relaciones Públicas: saber decir. Conceptos y programas para la acción; La Ética en el periodismo (los cinco factores que interactúan en la deontología profesional), El Periodismo en 6 Dimensiones, Comunicación global: Teorías, Usos y Poder, El Periodista: Titulación y ejercicio, Los oligopolios en la Comunicación y Narcisazo: ¿Homicidio o suicidio? -Las dos caras de una ausencia misteriosa- y Persevere y Triunfe. Relato de un viacrucis gremial.

Asimismo, el actual presidente de la Asociación Dominicana de Profesionales de Relaciones Públicas (Asodoprep) ha escrito y editado los libros Estragos de la Infidelidad. Una Novela Recostada en un Asesinato Espantoso, Soplos sin Chimeneas. Cuentos divertidos y poemas verdes; Venas de Secretos Abiertas (poemas) y Brujas en el Jardín (cuentos).

También es co-autor de libros-memorias, como Diversidad tecnológica y comunicación. Una mirada a nuestra América, Universidad Iberoamericana, México; V Congreso de Sexualidad Humana Mujer y Sida, Instituto Apec de Educación Sexual (INSAPEC), Comunicación al Servicio de la Promoción Humana, II Feria de la Comunicación; Antología Concurso de Poesía 1984, Casa de Teatro, y El Libro Blanco del Periodismo Dominicano, Fundación Global Democracia y Desarrollo (FUNGLODE).

………………………………….

2 de noviembre de 2025.

Continue Reading

Edificio La República: Restauración No. 138, cuarta planta, Santiago, República Dominicana. Teléfono: 809-247-3606. Fax: 809-581-0030.
www.larepublicaonline.com  / Email: periodico@larepublicaonline.com
Copyright © 2021 Blue National Group