Luis Rosario, coordinador de la Pastoral Juvenil.
SANTO DOMINGO.- El manejo de la sexualidad en los menores debe estar bajo la responsabilidad de los padres, el Estado y la sociedad, a juicio de Luis Rosario, coordinador de la Pastoral Juvenil.
«Querer llevar el tema de la campaña de Profamilia sobre la sexualidad en menores, y el aborto al campo religioso es una forma de confundir a la población, haciendo creer que la oposición de la Iglesia católica a la promiscuidad sexual en los menores y el aborto, responde a una mentalidad inquisitoria anacrónica, y a un afán de imponer sus creencias religiosas en la sociedad», expresó.
Destacó que la Pastoral Juvenil rechaza que se promueva, por cualquier medio, la actividad sexual en los niños, niñas y adolescentes, bajo el pretexto de que se trata de un derecho humano.
De igual forma, rechazó la promoción del aborto como solución a «situaciones surgidas de abusos sexuales», ya que atenta contra la inviolabilidad de la vida. “Un crimen como el aborto, nunca puede ser considerado un derecho”, indicó.
«Querer callar a la Iglesia y a quienes se oponen a esa publicidad antieducativa, no es más que rechazar el juego democrático. Mientras por una parte, se exige la libertad de expresión hasta el extremo provocador de los contenidos de la campaña, por otra, se es intransigente con posiciones que disienten de los propios puntos de vista», manifestó.
Agrgó que » la Iglesia no ha hecho más que utilizar el canal democrático, establecido por la Constitución y las leyes, para impedir la violación de un derecho, al solicitar un recurso de amparo contra la campaña antes señalada sobre los derechos sexuales y productivos, que contradice la autoridad que la ley le confiere al padre y la madre sobre su prole».
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