Santo Domingo.-Son muchas las definiciones que existen sobre la felicidad, sin embargo es importante resaltar que cada persona decide ser feliz a su manera, unos la buscan en otras personas, un estilo de vida o hasta en el trabajo.
Para los psicólogos la felicidad es un estado emocional positivo que los individuos alcanzan cuando ven realizadas sus metas.
Los expertos consideran también que la misma se consigue a través de la capacidad que tiene cada quien en buscar soluciones a los diferentes aspectos que conforman su vida cotidiana.
El neurólogo Sigmund Freud la define como algo utópico, que para ser posible no debe depender de un mundo real, donde los individuos están expuestos constantemente a experiencias desagradables. El experto sostenía que a lo máximo que podría aspirar un ser humano es a una felicidad parcial.
Mientras que la experta y promotora de felicidad, Carmen Lina Martínez, la identifica como un estado continuo y lineal de serenidad y calma interior, que te permite asumir tus experiencias, y guía tu actitud y decisiones ante la vida de una forma positiva, satisfactoria y plena.
Al preguntarle por qué cree que el ser humano trata de buscar la felicidad en otra persona y no en sí mismo y en su entorno, dice que esas personas erradamente están enfocadas hacia lo externo y atribuyen la responsabilidad de su bienestar a otros olvidándose de que es algo personal que se encuentra en su interior.
¿Cómo podríamos identificar cuando somos felices?
Eres feliz, si sientes paz, así de simple. La paz es el validador o el termómetro que mide tu felicidad.
¿Se puede establecer la diferencia entre la felicidad de un adulto y un niño?
La felicidad de un niño está impregnada de inocencia, no tiene juicio, su alma y mente están más limpias de creencias que lo limiten a sentirse feliz. Un menor no analiza tanto la situación; simplemente disfruta cada experiencia y cuando tiene alguna que no la disfruta la olvida y punto.
En cambio, los adultos van acumulando temas en su cabeza hasta consolidar un conjunto de creencias y miedos que los frenan, y sin darse cuenta caen en circunstancias impuestas por el entorno social y deja de apreciar las pequeñas cosas que les hacen felices.
Creo que los adultos estamos tan enfocados en nuestros quehaceres y teneres que hemos olvidado nuestro ser, y precisamente allí es donde hemos perdido la costumbre de apreciar lo que nos puede hacer feliz, explicó la también coach.
Tips a adoptar para ser feliz.
-Debemos hacer cambiar la percepción de que es inalcanzable, ya que es algo completamente lograble si tomamos la decisión de serlo.
-Es importante aprender a obviar las emociones negativas, como la tristeza, el enojo o la frustración. No es que no las sentiremos, pero sí debemos manejarla desde un punto de vista sutil, dijo la experta.
-Para ser felices es practicar la coherencia en nuestras vidas. La coherencia se refiere a la reconciliación personal con los pensamientos, sentimientos y decisiones.
.-Practicar la ‘disfrutología’. Hacer más de lo que nos hace felices, lo que nos hace disfrutar, siempre que no dañe la integridad propia o la ajena.
“Muchas veces lo que nos falta para ser felices es un ajuste en nuestra coherencia de vida; que todo lo que deseas, piensas, sientas, hables y cómo actúes, coincida”, dijo
-Por último, luego de aprender a vivir felices, el siguiente paso es transmitirla a otros, impactar positivamente la vida de los demás.
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